De un momento a otro será publicado el decreto presidencial por el cual el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México dejará de estar bajo la administración de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) para ser integrada a la Secretaría de Marina Armada de México (Semar) que, a su vez, la sumará a los activos del consorcio Casiopea, en donde se agrupan las empresas públicas administradas por las fuerzas al mando del almirante Rafael Ojeda. Y junto con ello también es inminente que el Aeropuerto Internacional de Toluca también pasará a ser parte de Casiopea en cuanto que el gobierno de Alfredo del Mazo tuvo que acatar las instrucciones de la gobernadora electa, la morenista Delfina Gómez, para desincorporar las acciones del gobierno del Estado de México en esa terminal aérea para ser traspasadas a la Marina.
Es decir, dos de las tres terminales del Sistema Metropolitano de Aeropuertos, que en conjunto reciben la mayor cantidad de viajeros del país, serán parte de Casiopea. El AICM, dirigido por el vicealmirante Carlos Velásquez Tiscareño, probablemente cierre 2023 tras movilizar 52 millones de pasajeros, un promedio de casi 142 mil 500 personas por día, en tanto que el aeropuerto de Toluca, dada la reactivación de vuelos principalmente de Viva Aerobús y Volaris, terminaría este año movilizando 1.5 millones de personas (un promedio de cuatro mil 110 de pasajeros diarios) y estar ya integrado a Casiopea.
Y como es sabido, el tercer aeropuerto del Sistema Metropolitano, el Internacional Felipe Ángeles, es administrado por a secretaría de la Defensa Nacional a través del equipo del general Isidoro Pastor. Pese a ser una infraestructura nueva, con un diseño funcional y con moderno equipamiento electrónico para gestionar el paso de personas, equipaje y mercancías, su despegue a sido complicado y registró, en su primer año de funcionamiento poco mas de 1.2 millones de pasajeros.
Espera mejorar y cerrar 2023 con la movilización de 1.9 millones de personas al lograr pasar de 7 mil a 10 mil pasajeros diarios, también derivado de una mayor cantidad de destinos e itinerarios. Y también apostando sobre todo a que la nueva aerolínea paraestatal, Mexicana del Bienestar, realice vuelos hacia el nuevo Aeropuerto de Tulum y destinos turísticos nacionales como Palenque (también bajo administración militar), Tijuana y Guadalajara.
AICM, ¿qué viene?
El aeropuerto mas importante del país es sin duda el de la infraestructura más agotada. Con 70 años a cuestas, ha sido declarado en estado de saturación desde 2014. Eso significa que no se pueden aumentar más los itinerarios, pues ya trabaja en los límites de seguridad con hasta 55 aterrizajes y despegues por horas en los horarios pico; ante ello, las aerolíneas han optado por utilizar aviones más grandes y alinear sus propios itinerarios para obtener los mayores índices de ocupación posibles.
Sin embargo, el AICM estaba destinado a ser cerrado y reconstruido como espacio urbano, recreativo, habitacional, comercial y educativo cuando entrara en operación el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco, es decir en julio de 2022. Pero la cancelación de esa obra implicó que el septuagenario prolongara su vida útil mucho más allá de de lo recomendado. Y su problema es que requiere una muy grande cantidad de dinero para lograr una rehabilitación y reconstrucción total.
De hecho, la recimientación de la Terminal Dos (encargada al gobierno de la Ciudad de México con la finalidad de apuntalar la popularidad de Claudia Sheinbaum, la aspirante presidencial favorita de Andrés Manuel López Obrador) es una obra de alcance limitado para una infraestructura que llegó a su fase de agotamiento físico hace ya siete años. De hecho, el mal olor que le caracterizaba era por que los drenajes rotos enviaban las aguas negras hacia la base de ese edificio… que en términos técnicos era la tapadera de una gran fosa séptica.
Y la Terminal Uno tiene tal nivel de daño estructural que la única solución viable es su demolición completa y construir una nueva.
Sin embargo, al AICM se le han realizado importantes arreglos para mantener su funcionalidad en los que se habrán aplicado 8 mil 106.9 millones de pesos desde 2019 al 2023, destacando los trabajos de mantenimiento (sanitarios, escaleras eléctricas, elevadores, cárcamos, muros, drenajes) así como 2 mil 205 millones de pesos en la reparación y arreglos en pistas, plataformas, calles de rodajes y áreas operacionales.
Hacia el futuro, una solución para mantener su funcionalidad, lo deseable sería que, en vez de dos terminales en cada extremo del polígono, sólo hubiese una sola y gran terminal bien conectada en los accesos terrestres y transporte masivo… que lógicamente debería estar de lado de la actual Terminal Uno y aprovechar los predios que en el Peñón de los Baños tiene el AICM y Aeropuertos y Servicios Auxiliares.
Claro, para ello se requiere, otra vez, mucho dinero, el cual sí genera el AICM (32 mil millones de pesos anuales en pura Tarifa Única Aeroportuaria), pero que está empeñado para pagar intereses y principal de los Bonos MexCat que se pagan por el NAIM… el cual está extinto.
@mfloresarellano
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