Ya no habrá competencia desleal en la venta de maíz blanco para tortilla, o al menos eso es lo que dio a entender el presidente Andrés Manuel López Obrador, ya que se está importando maíz blanco transgénico y es usado para consumo humano en la elaboración de tortilla, por lo que aseguró que impedirá que sea usado en la producción del alimento mexicano.
“Esto se relaciona con un acuerdo que estoy por firmar en esta semana para que en las tortillerías sólo se use maíz blanco y no transgénico. Esto va a ir acompañado del establecimiento de aranceles para que no se importe maíz blanco y se compre a los productores nacionales el maíz blanco. Porque también se dice: ‘Se importa maíz blanco más barato’; sí, pero resulta que ese maíz blanco también es transgénico, y tenemos las pruebas”, afirmó el jefe del Ejecutivo.
En entrevista para ejecentral, Roberto Sámano, presidente de Grupo Samasa, explicó que los que se verán afectados por esta medida serán en primera instancia los grandes grupos, que son los líderes en la elaboración de harina nixtamilizada y tienen prácticamente el control del mercado.
Con relación a los tortilleros de barrio, Sámano consideró que para ellos el precio de cualquier grano, sea transgénico o no, llegan al mismo precio, por lo que no les conviene ese tipo de compras, además de que la consistencia y su envase es diferente por lo que se darían cuenta inmediatamente y es preferible el nacional.
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Señaló que el grano transgénico está prohibido para consumo humano, aunque no descarta que pueda estar siendo usado.
Las nuevas medidas del Presidente mexicano desatarán inconformidades de sus socios comerciales, Estados Unidos y Canadá, debido a que gran parte del actual consumo del grano genéticamente modificado proviene de esos países, aunque se ha mencionado que sólo es para forraje. Aún así, el mandatario recordó que “nosotros no permitimos el uso de maíz transgénico para consumo humano, fue un compromiso que hicimos desde la campaña y se está cumpliendo”.
Sámano indicó que la producción de tortilla ha caído y no se ha recuperado desde la pandemia, hay una baja de hasta el 27 % en la demanda del alimento y muchos empresarios han vendido su negocio o simplemente han cerrado, a la par de que los insumos y gastos se dispararon.
El gobierno estadounidense pidió una mesa de solución de controversias en el marco del Tratado Comercial México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para que nuestras autoridades expliquen en términos científicos por qué se está prohibiendo la importación de maíz transgénico, y aunque aún no han presentado fundamentos basados en la ciencia, el presidente López Obrador mencionó que pedirá que en conjunto hagan un estudio para saber “qué daños ocasiona a la salud, y que esto es bueno para nosotros y es bueno para ellos, para los consumidores mexicanos y para los consumidores de Estados Unidos”.
Agricultores en México están desesperados por los bajos precios del maíz. En Sinaloa se han manifestado porque su producción no se está vendiendo a un precio justo debido a que el maíz importado es más barato y ese precio no cubre los costos que tiene una producción en México.
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