El sacerdote agustino recoleto naturalizado mexicano, Francisco Javier Acero Pérez, quien es Vicario Provincial para México y Costa Rica, fue nombrado por el Papa Francisco como Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de México.
La Conferencia del Episcopado Mexicano anunció que este nombramiento fue publicado este 15 de septiembre en L’Osservatore Romano, con lo que el padre nacido en Valladolid, España, se sumará al auxilio del arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes.
Sobre ello, el semanario Desde la fe precisó que son ya seis los obispos que auxilian al cardenal en el gobierno pastoral, con Carlos Enrique Samaniego López, Héctor Mario Pérez Villarreal, Salvador González Morales, Luis Manuel Pérez Raygoza, And´res Luis García Jasso.
Agradezco al Papa Francisco por concedernos un hermano Obispo Auxiliar en la personal del P. Javier Acero Pérez, OAR, quien se sumará para el servicio pastoral de la Arquidiócesis Primada de México”, escribió sobre este nombramiento el arzobispo Carlos Aguiar Retes.
Mientras que la Conferencia del Episcopado Mexicano destacó que, en su formación, monseñor Francisco Javier Acero Pérez estudió desde la infancia con los agustinos recoletos, con quienes realizó estudios primarios y de bachillerato.
Dentro de los cargos que destacó se encuentra su ejercicio por 13 años como vicario parroquial y párroco, acompañante y capellan en la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe de los Hospitales en la Ciudad de México.
Además de ser promotor y primer presidente de la obra social CARDI, institución de los agustinos recoletos en la Ciudad de México; así como miembro del Comité de ética médica y bioética del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional Siglo XXI.
Asimismo, destaca que es profesor de la Universidad Pontifica de México, en la licenciatura de Teología Pastoral y la maestría de Teología y Psicodinámica de la familia.
Por su parte el Centro de Investigación y Formación de Protección al Menor (Ceprome) celebró el nombramiento del padre Francisco Javier Acero y azuzó su “profunda calidad humana” marcada por su acompañamiento de personas.
También precisó que el sacerdote es parte de Ceprime desde 2019, centro al cual ha ayudado a extender su labor por diversos países con su compromiso “en la lucha contra de los abusos en la iglesia y en la promoción de ambientes seguros para menores y personas vulnerables”.
