México es un país constitucional, democrático y de derechos, en consecuencia, también de libertades. Sin embargo, históricamente el gobierno ha tenido una actitud y aptitud paternalista; protectora de los ciudadanos en aparente desventaja estableciendo políticas públicas que impiden el ejercicio de algunos derechos y libertades. En algunos casos ha sido necesario anteponiendo la salud pública. Tal es el caso de normas restrictivas para consumir drogas, tabaco y alcohol con la condición de ser mayores de edad para poder adquirir y consumir este tipo de sustancias; sin embargo, tratándose de cigarrillos electrónicos se generó una norma prohibicionista de forma total.
En días pasados, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvió un par de amparos pronunciándose en contra de la prohibición; la base de toda libertad es: prohibido prohibir. Ello, como principio garante del respeto al Estado de derecho. En una de ellas se toca el tema de prohibir la realización de corridas de toros como espectáculo de esparcimiento. En lo particular celebro que los ciudadanos elijan qué espectáculos ver, ya que a los que nos gustan los toros sabemos que es una gran fiesta, en donde si bien es cierto el toro puede o no perder la vida en el ruedo, también lo es que esa raza está diseñada para que después de su crianza en el campo bravo, se desempeñe jugando la vida y ponga a prueba al torero; el animal debe de desarrollar en la crianza: corpulencia, fuerza, músculo, bravura, nobleza, fijeza, y un sin número de cualidades que también con su cornamenta pueda lesionar e incluso matar al torero; hay mucha historia detrás de la tauromaquia y la crianza de los toros; lo importante es que la SCJN deja al libre albedrío a los ciudadanos de este país si quieren o no ir a una corrida de toros.
La otra resolución en que la SCJN pone a prueba la máxima de prohibido prohibir es cuando resuelve sobre la prohibición de la venta de cigarros electrónicos también conocido como vapeadores; si bien es cierto el vapor que puede ser aspirado a través de estos mecanismos puede contener químicos relacionados a aromas a sabores como el tabaco, frutos que incluso la marihuana; lo importante es que deja en libertad a las personas mayores de edad en hacerse responsables de qué sustancias introducen a su cuerpo, y cuál va a ser la consecuencia. Esto mismo ha ocurrido con el tabaco el alcohol y las drogas como la marihuana y cualquier otra droga o sustancia adictiva.
No es la primera vez, que la SCJN ha resuelto bajo el principio máximo de privilegiar las libertades “prohibido prohibir”; ya los habían hecho en el caso del aborto, también es cierto que la más alta autoridad jurisdiccional de este país ha buscado con sus resoluciones equilibrar entre las libertades, los derechos y la salud pública. Tal es el caso de haber ordenado al poder legislativo federal pronunciarse en materia del consumo legal de la marihuana sin que hasta la fecha se haya dado cumplimiento con la misma.
De forma y fondo, los mexicanos debemos de asumir nuestra mayoría de edad ciudadana, para evitar que el gobierno tome una forma paternalista de gobernar, ya que con ello se merma el Estado de Derecho y se coartan las libertades.
En este cierre de año los legisladores federales, quedaron a deber un sin número de leyes y normas que permitan el equilibrio en el costo-beneficio de un consumo responsable de cualquier sustancia el caso de la marihuana es una que ahora se suma con el uso de cigarros electrónicos quizás con un pago de impuestos adicionales por el riesgo a la salud individual y el costo colectivo de ello; pero siempre privilegiando el derecho a decidir, sobre el derecho a prohibir.
Nota el pie de página:
Ayer el Club América ganó su campeonato número 14; mis felicitaciones al dueño, directivos, jugadores, aficionados; fue la mejor forma de despedir al estadio Azteca camino a la remodelación que le permitirá ser el anfitrión del partido inaugural de la copa mundial de fútbol FIFA 2026, siendo histórico en todos los sentidos ya que será el único en el mundo que tenga tres copas FIFA jugadas en él.