Al menos seis personas murieron y 24 resultaron heridas en otro asesinato masivo en Estados Unidos después de un tiroteo en un desfile del 4 de julio en un suburbio de Chicago.
El ataque en Highland Park interrumpió el desfile anual en conmemoración de la Independencia de Estados Unidos después de que comenzara, a las 10 de la mañana y trajo una escena empapada de sangre.
Incluso, una persona de nacionalidad mexicana murió en el tiroteo, confirmó la Secretaría de Relaciones Exteriores a través del canciller Marcelo Ebrard, quien desde su cuenta de Twitter el funcionario expresó: “Me informa Reyna Torres, Cónsul de México,que hay un connacional entre quienes han perdido la vida en el tiroteo que tuvo lugar en Chicago. Condolencias a familiares y amigos. Acompañamos a la comunidad de Chicago en su dolor y tristeza por esta tragedia”.
Pero no sólo eso, pues también se suman dos connacionales entre los heridos, de acuerdo con el jefe de la Unidad para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Roberto Velasco.
Terror en el desfile
En Chicago, el comandante de policía de Highland Park, Chris O’Neill, mencionó que el hombre armado aparentemente abrió fuego contra los asistentes al desfile desde la azotea de un negocio con un “rifle de alta potencia” que fue recuperado en la escena.
De acuerdo con los últimos reportes, “dos docenas de personas han sido transportadas al hospital de Highland Park. Se ha confirmado la muerte de seis”, mencionó O’Neil, de la policía de esta localidad acomodada de unos 30 mil habitantes a orillas del lago Michigan.
La policía ha dicho que cinco adultos murieron en el lugar y un sexto en un hospital del área; además de un niño gravemente herido se encontraba entre los transportados a instalaciones médicas.
El sospechoso fue descrito como un “peligroso” hombre blanco de entre 18 y 20 años en posesión de un “rifle de alta potencia”, y fue capturado horas después, con lo que se supo que su nombre es Robert Crimo.
Así, se desencadenó una gran persecución en Highland Park y sus alrededores, donde varias comunidades cercanas también cancelaron sus celebraciones del 4 de julio por temor a un segundo asalto.
En su momento, Christopher Covelli, portavoz de la Fuerza Especial contra Crímenes Graves del Condado Lake, aseguró que la policía cree que sólo hubo un tirador y advirtió que debe ser considerado armado y peligroso.
En entrevista para el Chicago Sun-Times, Miles Zaremski, residente de Highland Park, dijo haber escuchado de 20 a 25 disparos, que fueron en rápida sucesión. “Así que no pudo haber sido solo una pistola o una escopeta”, añadió.
En tanto, el presidente Joe Biden, dijo que tanto él como su esposa Jill estaban “conmocionados por la violencia armada sin sentido que una vez más trajo dolor a una comunidad estadounidense en este Día de la Independencia”.
El tiroteo ocurre en el contexto de una ola de violencia armada que azota a Estados Unidos, donde cerca de 40 mil personas mueren anualmente por armas de fuego, según el sitio de Gun Violence Archive.
