En los últimos dos años el hambre repuntó a nivel mundial, sobre todo en países en conflicto, a pesar de haber disminuido en las últimas dos décadas. De acuerdo a un informe publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) al menos un 25% de la población padece hambre en la mitad de los 16 países considerados en el estudio, entre los que destacan Afganistán, la República Centroafricana, Somalia, Sudán del Sur, Siria, Ucrania y Yemen. La FAO reveló a través de una evaluación que el número de personas afectadas se elevó de 777 millones a 815 millones entre el año 2015 y 2016, de ellos 489 millones viven en países asolados por conflictos, por ello es crucial proporcionar ayuda alimentaria a los más vulnerables.
El estudio revela que países como República Democrática del Congo llamaron la atención de la FAO y la PMA debido a que la situación se deteriora rápidamente con una reducción drástica de las áreas de cultivo, mientras que en Líbano la llegada de más de un millón de refugiados sirios puso mucha presión sobre las infraestructuras y la economía del país de Oriente Medio donde se estima que el 91% de las familias sirias padecen hambre. Además, en los países de la cuenca del lago Chad, la malnutrición ha alcanzado niveles alarmantes, en particular en el noreste de Nigeria. (Con información de ONU Noticias México) TB