El viaje de tres estadounidenses a México para disfrutar las festividades por el Día de Muertos culminó en tragedia: Kendace Florence, Jordan Marshall y Courtez Hall, murieron – según las versiones preliminares – de intoxicación por monóxido de carbono, aunque esa versión no satisface a sus familias y exigen justicia.
De acuerdo con la carpeta de investigación que abrió la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, los tres jóvenes fueron encontrados sin vida el pasado 30 de octubre en un departamento de Santa Fe, el cual alquilaron a través de la plataforma Airbnb.
Una llamada de alerta de Víctor Day, pareja sentimental de Florence, a la dueña del departamento motivó la inspección del lugar por personal de seguridad del condominio, quienes descubrieron a las tres personas sin vida, presuntamente por inhalación de gas.
En entrevista para el diario El País, Víctor contó que mantuvo comunicación con Florence la madrugada del 30 de octubre; ella le mencionó que se sentía mal, incluso afirmó que por videollamada pudo ver como vomitaba.
Al terminar la conversación ambos se dispusieron a descansar, pero a la mañana siguiente Víctor no pudo comunicarse con ellos, por lo que alertó a la anfitriona del Airbnb, quien más tarde le comunicó que los tres estaban sin vida.
Pese a la investigación de las autoridades de la Ciudad de México, las familias de los tres turistas dudan de la versión que apunta a una intoxicación con gas; Víctor Day, recalcó que su novia presentaba síntomas de agotamiento y malestar: “Me siento como drogada , Como si hubiera tomado éxtasis, pero no lo hice”, dijó Florence a su pareja.
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Víctor aseguró al diario español que las familias de las tres víctimas no han recibido una información concreta de parte de las autoridades mexicanas: “Solo han estado diciendo que las investigaciones continúan, pero ya pasó demasiado tiempo. Ha sido muy difícil”, se lamenta.
“Si el gas fue la causa, ¿Cómo es posible que los sensores no los alertaran? ¿Cómo es posible que los guardias de seguridad que los encontraron no se intoxicaran también? y ¿Cómo podría Kandace decirme que se sentía drogada mucho antes de que volviera a casa?”.
La madre de Jordan, Jennifer Marshall, también habló con el portal Wavy, a quien dijo que la comunicación con las autoridades de México ha sido complicada, no solo porque no habla español, también porque no les han dado certeza de que en realidad se trató de una muerte por intoxicación.
Mientras la Embajada de Estados Unidos en México confirmó tener contacto con las familias de Florence, Jordan y Courtez, ellas esperan que sus cuerpor sean trasladados a la Unión Americana esta semana, aún sin una respuesta concreta por parte de las autoridades de la Ciudad de México. EJ
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