Graves maltratos y violaciones a sus derechos han sufrido menores que viven en las seis sedes del albergue La Ciudad de los Niños, tres de ellas en Salamanca, Guanajuato, bajo la complicidad de autoridades e instituciones como los sistemas DIF estatal y municipal y el Registro Civil. En un reportaje que publica el medio digital Zona Franca, precisa que ello quedó evidenciado gracias a una denuncia anónima y la resolución de amparo presentado en 2016, para impedir que sacaran a una niña de 7 años del albergue luego de que en una visita el DIF documentara que fue quemada en una estufa por robarse una plastilina. La resolución del juicio de amparo indirecto con número 475/2016-VIII, emitida por la juez Karla María Macías Lovera, del juzgado Noveno de Distrito en Irapuato, puso al descubierto la situación en que estarían al menos un centenar de niños y niñas. Estos albergues son dirigidos por el sacerdote Pedro Gutiérrez Farías, quien está respaldado por funcionarios y políticos estatales y federales. De acuerdo con testimonios de los niños y funcionarios, y que obran en el expediente, queda evidenciado que han sufrido violencia física, sexual y psicológica que pone en riesgo su integridad, por lo que la juez federal pidió que los menores fueran reubicados en otras instituciones. La juez Macías Lovera establece en su fallo que han existido omisiones de las autoridades que han propiciado los posibles abusos. En los testimonios, a los que accedió Zona Franca, se documentan las agresiones de las que han sido víctimas los menores, que van desde golpes con palos, tablas, pellizcos, abuso psicológico y sexual, lesiones graves, hambre, desnutrición, encierros en cuartos de menos de un metro de alto, carencia de alimentos, quemaduras e incluso pérdida de la identidad. En una de las declaraciones de un menor internado, señala que varias niñas resultaron embarazadas por abusos del padre Gutiérrez; sin embargo, se las llevaban sin que volvieran a saber nada de ellas. Desafortunadamente, algunos de los niños llegaron a normalizar las agresiones de las que eran víctimas, por lo que afirmaban que “no se la pasaban mal, solo les pegaban”. Como requisito para poder ingresar a La Ciudad de los Niños, los padres que decidieran entregarlos de manera voluntaria eran obligados a firmar un documento en el cual cedían la custodia y patria potestad de sus hijos al sacerdote encargado de esta institución, por lo que perdían todo derecho sobre ellos y solamente podían visitarlos por 15 minutos cada seis meses, siempre en presencia de algún miembro del personal del albergue. Además de perder a sus padres, al menos 134 niños y niñas perdieron sus apellidos, pues en el Registro Civil fueron reemplazados por los del sacerdote y el de la monja Hortensia Jiménez Cruz, trabajadora de La Ciudad de los Niños. El testimonio de una chica que vivió en el internado dijo no recordar cómo se llamaba antes de ingresar a la casa hogar, el número y nombre de sus hermanos, ni siquiera el nombre de su madre. La Asociación Civil Ciudad de los Niños Salamanca A.C. se conformó en 1978, y su directiva la integran el sacerdote Pedro Gutiérrez Farías y las monjas Hortensia Jiménez Cruz, Xóchitl Chávez Sánchez, Esmeralda De Jesús Suárez Bertury, Leandro Martín Bermúdez Armenta, Mauricio Rafael Ruiz Martínez, Marco Antonio Ruiz Martínez y Ramiro Cortez Muñoz. De acuerdo a declaraciones de una colaboradora del padre Pedro, el sacerdote que cuenta con seis asociaciones en domicilios diferentes, tres en Salamanca, una en Moroleón, una en Irapuato y una en Morelia. En una declaración ante el Ministerio Público, el padre Gutiérrez señaló que Ciudad de Los Niños de Mancera opera desde 1977, Ciudad Infantil desde 1996 y Ciudad Juvenil desde el 4 de agosto 2004. Las tres sedes en Salamanca. En Ciudad Infantil hay 38 niños y niñas desde lactancia hasta término de la primaria. En la Ciudad de Los Niños, hay 49 mujeres de primaria hasta la universidad y niños de primaria. En la Ciudad Juvenil, hay 19 jóvenes de secundaria hasta universidad. El personal a cargo de estas instituciones está integrado por sacerdotes, religiosas, seminaristas y voluntarias, ninguno de ellos con la preparación adecuada para atender a chicos en situación de vulnerabilidad. En su resolución, la juez Macías señaló que a los niños, niñas y jóvenes se les ha transgredido los derechos a la identidad; a vivir en familia; el acceso a una vida libre de violencia y a la integridad personal; a la salud, a la intimidad, a una vida digna y al acceso a la justicia. Apuntó como uno de los principales responsables a las autoridades del DIF Guanajuato, la cual era encargada de realizar revisiones periódicas a las casas de asistencia social, con lo cual se podría haber evitado la violación a los derechos humanos en la casa hogar. Más de 30 instituciones privadas en Salamanca otorgan becas a los albergados. Además de tener como obligación el ir a la escuela, están obligados a estudiar algún oficio como ser parte del Coro, Orquestas, Mariachis, Banda, Danza, herrería y mecánica. Los principales benefactores de los albergues a cargo del Padre Gutiérrez en Guanajuato son políticos,entre los que destaca el expresidente Vicente Fox Quesada y su esposa Marta Sahagún, quienes en 2016 inauguraron la “Ciudad Juvenil” que atendía a 200 personas. Otros políticos que han aportado recursos son el exgobernador de Guanajuato, Juan Carlos Romero Hicks y su esposa Frances Hickman, así como el senador priista y líder de los petroleros, Carlos Romero Deschamps, el propio sindicato de Pemex. Incluso se ha mencionado a el cantante Marco Antonio Solís “El Buki”, y alguna parte de la sociedad (FOTO: Facebook/Ciudad de los niños Salamanca A.C.) MR|EC
5 de Noviembre de 2024
