Cinco civiles murieron el miércoles en la explosión de una bomba en el sureste de Turquía, una región de mayoría kurda, anunciaron las autoridades locales, que acusaron del atentado al grupo armado Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK).
La explosión se produjo hacia las primeras horas del día “al paso de un vehículo que transportaba civiles”, declaró el gobernador de Diyarbakir en un comunicado.
Fue un “atentado con una bomba de fabricación artesanal del PKK”, afirmó el gobernador.
El PKK, un grupo calificado de
“terrorista” por Ankara y sus aliados occidentales, lleva a cabo desde 1984 una guerra de guerrillas en las zonas kurdas de
Turquía.
Los enfrentamientos entre los combatientes kurdos y las fuerzas de seguridad turcas han causado desde entonces la muerte de más de 40.000 personas.