EU ve negro panorama sobre derechos humanos en México
Un informe sobre atrocidades, impunidad y corrupción en el sistema de justicia se emite a cuatro días de que López Obrador viaje a la Casa Blanca

A cuatro días de la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a Washington, la Embajada de Estados Unidos en México emitió un desolador reporte sobre la situación de los derechos humanos, el cual deja mal parados a militares y agentes policiacos mexicanos.
“Asesinatos ilegales o arbitrarios por parte de la policía, el Ejército y otros funcionarios gubernamentales; desapariciones forzadas a manos de agentes gubernamentales; tortura y trato degradante por parte de las fuerzas de seguridad”, son algunas de las anomalías que enumera el documento México: Informe de Derechos Humanos 2021, publicado el jueves por la embajada y los consulados estadounidenses en el país.
También se identificaron “condiciones carcelarias duras y potencialmente mortales; arrestos o detenciones arbitrarias; restricciones a la libertad de expresión y a los medios de comunicación, incluida la violencia contra periodistas; actos de corrupción; investigación y rendición de cuentas insuficientes en relación con la violencia de género, incluida, entre otras, la violencia doméstica y de pareja”.
Apenas en marzo pasado, 19 legisladores federales estadounidenses enviaron una carta al secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en la que expresan su preocupación por los derechos humanos en México y solicitando que trabaje con el gobierno mexicano para abordar la protección de migrantes, la seguridad pública y el Estado de derecho.
“La impunidad y los índices extremadamente bajos de enjuiciamiento seguían siendo un problema para todos los delitos, incluidos abusos de los derechos humanos y corrupción. Se recibieron denuncias de que algunos agentes del gobierno eran cómplices de grupos internacionales de la delincuencia organizada, y los índices de enjuiciamiento y condena por estos abusos eran bajos”, señala el informe, que contradice el discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha descartado que agentes del Estado estén implicados en desapariciones, torturas y otras violaciones a los derechos fundamentales.
Sobre el papel de las autoridades mexicanas, el reporte diplomático de Estados Unidos deja en claro que “los elementos de la delincuencia organizada cometieron una gran cantidad de delitos violentos y actos de homicidio, tortura, secuestro, extorsión, trata de personas, soborno, intimidación y otras amenazas, lo que dio lugar a altos niveles de violencia y explotación, dirigidos especialmente a grupos vulnerables. El gobierno investigó y enjuició algunos de estos delitos, pero la gran mayoría quedaron sin investigar ni enjuiciar”.
El equipo diplomático de Estados Unidos identifica a las desapariciones como uno de los problemas más persistentes, especialmente en zonas con altos niveles de violencia relacionada con los cárteles o las pandillas. Según el texto, “hubo informes de varias desapariciones forzadas por parte de grupos de la delincuencia organizada, en ocasiones, con denuncias de confabulación de oficiales de seguridad y funcionarios federales, estatales y locales corruptos con bandas criminales”.
Hasta encontrarlos. El gobierno de Estados Unidos ha hecho saber a las autoridades mexicanas que el respeto a los derechos humanos debe ser uno de los pilares de la relación bilateral.
SIGUE LEYENDO: