Singapur. La Armada de Estados Unidos ordenó el lunes una “pausa operacional” en todo el mundo para evaluar su flota e investigar la colisión de un destructor con un buque petrolero cerca de Singapur, que dejó 10 marinos desaparecidos y 5 heridos. En el dramático accidente hizo agua el USS John S. McCain, dotado de misiles teledirigidos y que llegó escoltado por dos barcos a un puerto de Singapur con un gran boquete en el casco.
Esta es la segunda colisión (...) y el último de una serie de incidentes en el comando del Pacífico” en los últimos meses, dijo el almirante John Richardson, jefe de operaciones navales de Estados Unidos. Esta tendencia exige una acción más enérgica. Por ello, he ordenado una pausa operacional en todas nuestras flotas en el mundo”, aseguró el responsable en un comunicado, añadiendo que propiciará reuniones para “garantizar operaciones seguras y efectivas” además de investigaciones adicionales para saber qué generó los accidentes.
No se informó oficialmente sobre cuánto durará la pausa operacional de la Marina más poderosa del mundo, activa en todos los océanos. Según medios estadunidenses, la pausa se traducirá en los hechos por una breve suspensión de las operaciones durante una o dos jornadas, durante la semana próxima o la siguiente, en cada nave de la Armada, para permitir a la comandancia pasar revista a las medidas de seguridad y las reglas básicas. El secretario de Defensa estadunidense, James Mattis, dijo durante una visita a Jordania que la “revisión más amplia” ordenada por Richardson “estudiará todos los factores” que llevaron a los últimos “accidentes e incidentes en el mar”. Esa revisión será adicional a las investigaciones que ya están en marcha sobre la colisión del USS McCain y del destructor USS Fitzgerald en junio frente a Japón, en un incidente que dejó siete marinos estadounidenses muertos. El último accidente sucedió en la madrugada de este lunes y desencadenó una gran operación de búsqueda y rescate de los diez marineros desaparecidos, con la participación de buques y aviones de tres países. Expertos aseguraron que la cercana ocurrencia de las dos colisiones abre interrogantes sobre si la Marina estadounidense ha querido abarcar demasiado en Asia, donde busca frenar las ambiciones estratégicas chinas y nucleares de Corea del Norte.
“Lamentable accidente”
El McCain chocó al este de Singapur con el petrolero de bandera liberiana Alnic MC, un barco cisterna de más de 30 mil toneladas usado para transportar petróleo o productos químicos, según el sitio especializado Marine Traffic. El destructor sufrió “daños significativos en el casco que derivaron en la inundación de los compartimentos cercanos, entre ellos literas de la tripulación, salas de máquinas y de comunicaciones”, precisó la Marina estadounidense en un comunicado. Un helicóptero trasladó a cuatro de los heridos a un hospital de Singapur con heridas que no implicaban riesgo para sus vidas, mientras que el quinto no necesitó mayor atención médica. El destructor de 154 metros de eslora, que colisionó con un petrolero algo mayor (182 metros) cuando se dirigía a Singapur para una escala de rutina, seguía pudiendo navegar por sus propios medios. “Es lamentable”, declaró el presidente estadunidense, Donald Trump, en una primera reacción a los periodistas que le preguntaron en Washington sobre el accidente a su regreso de vacaciones.
Pensamientos y oraciones para nuestros marinos a bordo del ‘John S. McCain’ donde se están realizando tareas de rescate”, agregó después en un tuit.
Segunda colisión en dos meses
Esta es la segunda colisión accidental sufrida por un buque de la Marina de Estados Unidos en los últimos dos meses. El 17 de junio, siete marinos murieron al chocar el destructor USS Fitzgerald con un carguero filipino frente a las costas japonesas. Los cuerpos de los marinos de entre 19 y 37 años fueron hallados por buzos al día siguiente en partes inundadas de la nave averiada. Una investigación intenta determinar las causas de la colisión. Los investigadores japoneses entrevistaron a la tripulación filipina del carguero de 222 metros de eslora, en tanto las autoridades de Estados Unidos también investigan el caso. Al igual que el Fitzgerald, el USS McCain forma parte de la Séptima Flota de Estados Unidos, con base en Yokosuka, Japón. Este mes, el John S. McCain había protagonizado un incidente con China, al navegar a sólo seis millas náuticas (11.1 km) del arrecife Mischief en el mar de China Meridional construido artificialmente por Pekín. La maniobra, realizada según Estados Unidos en ejercicio de la libertad de navegación, generó una protesta formal y pública de Pekín. En esa ocasión, el portavoz de la cancillería china, Geng Shuang, dijo que las maniobras del USS John S. McCain habían violado las leyes chinas e internacionales, afectando “seriamente” su soberanía y seguridad. El arrecife es parte de las islas Spratly, cuya soberanía es disputada por China y sus vecinos. El barco lleva su nombre en homenaje al padre y al abuelo del senador John McCain, que fueron almirantes de la Marina norteamericana durante la Segunda Guerra Mundial. EC