Redacción ejecentral
El Ejército de Estados Unidos comenzó a trasladar este miércoles partes de un sistema de defensa antimisiles a un lugar de despliegue en Corea del Sur, además de enviar un submarino nuclear para que se sume a las próximas maniobras con su portaaviones Carl Vinson, esto en medio de la tensión creada por los programas armamentísticos de Corea del Norte.
Los seis camiones que transportan los primeros elementos del escudo antimisiles norteamericano THAAD (Terminal High Altitude Area Defense) llegaron a Corea del Sur; el arribo de los vehículos al lugar en donde se instalará el material provocó que centenares de habitantes de la zona, preocupados por las consecuencias medioambientales del sistema, se manifestaran, provocando enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
Por su parte la televisión surcoreana difundió imágenes de la llegada de imponentes camiones militares trayendo elementos del THAAD al campo de golf donde se instalará, a 250 kms al sur de Seúl.
En paralelo Pyongyang anunció este miércoles el éxito de “los más importantes” ejercicios de artillería jamás llevados a cabo en el país.
Washington y Seúl habían anunciado el inicio del despliegue antimisiles el 7 de marzo, explicando que el mismo permitirá luchar contra la amenaza de los misiles balísticos norcoreanos que el régimen de Pyongyang persiste en querer desarrollar a pesar de las sanciones internacionales.
El escudo está diseñado para interceptar y destruir los misiles balísticos norcoreanos de corto y mediano alcance durante la fase terminal de su vuelo.
Estados Unidos y Corea del Sur decidieron desplegar el escudo THAAD tras las discusiones de principios de marzo pasado entre el presidente interino surcoreano y el vicepresidente norteamericano Mike Pence.
Washington envía refuerzos
En ese contexto, Estados Unidos decidió enviar a la región el portaaviones Carl Vinson y su flota aeronaval, que llegarán a Corea antes del fin de semana; a esta artillería se sumará el submarino nuclear USS Michigan, el cual arribó este miércoles a costas surcoreanas.
EU envió un submarino nuclear a la península de Corea, para que se sume a las próximas maniobras con su portaaviones Carl Vinson, en lo que pretende ser una muestra de fuerza ante el desafío planteado por Pyongyang con sus continuas pruebas de armas.
El sumergible de propulsión nuclear USS Michigan arribó este miércoles al puerto de Busan, en el sureste de Corea del Sur, confirmó un portavoz de Defensa de Seúl.
“El submarino dedicará la jornada a labores de aprovisionamiento y logística antes de unirse a las maniobras que el Carl Vinson y la marina surcoreana tienen previsto realizar hacia final de semana en el Mar del Este (nombre que se la da en Corea al Mar de Japón)”, detalló el portavoz.
La llegada del USS Michigan coincide con la celebración hoy del 85 aniversario del ejército norcoreano, una efeméride que Pyongyang ha festejado con el que podría ser su mayor ejercicio de artillería hasta la fecha, desplegando entre 300 y 400 piezas cerca de su costa oriental.
A este tenso panorama se suma la posibilidad de que el régimen de Kim Jong-un decida realizar su sexta prueba nuclear.
China en desacuerdo con el escudo
China se opuso abiertamente al despliegue del escudo, debido a que este escudo supone un factor de inestabilidad regional y una amenaza para sus propias capacidades balísticas.
El gobierno chino afirma que el sistema avanzado de radar puede penetrar de forma profunda en su territorio y minar su seguridad, al tiempo que hará poco por disuadir a Corea del Norte, por lo que se opone con fuerza a su despliegue.
“China insta con fuerza a Estados Unidos y a Corea del Sur a que detengan las acciones que empeoran las tensiones regionales y afectan a los intereses estratégicos de seguridad y cancelen el despliegue del sistema THAAD y retiren los equipos”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Geng Shuang.
El gigante asiático reaccionó muy negativamente ante el anuncio de despliegue del escudo y dictó una serie de medidas que Seúl considerada represalias económicas.
Una de estas medias, por ejemplo, consiste en que China prohibió a partir del 15 de marzo que grupos de turistas chinos viajen a Corea del Sur, lo que afecta la industria local.
La tensión se incrementó en la península coreana durante los últimos meses y el gobierno del presidente norteamericano Donald Trump ha dado respuestas belicosas a los ensayos de misiles balísticos norcoreanos.
Corea del Norte no se amedrenta
Tras un gigantesco desfile militar el pasado 15 de abril para conmemorar el 105 aniversario del nacimiento del fundador del régimen, Kim Il Sung, Corea del Norte aseguró haber llevado a cabo importantes maniobras el martes, coincidiendo con el 85 aniversario de la creación del ejército.
La prensa norcoreana habla este miércoles de los más importantes ejercicios de disparos de artillería, supervisados la víspera por Kim Jong-Un, al que se ve en unas fotos risueño ante semejante espectáculo.
Fotografías tomadas recientemente por satélite muestran actividad en el centro de pruebas atómicas de Punggye-ri, en el noreste del país asiático, que hace diez días exhibió en un gran desfile militar lo que parecen ser nuevos misiles balísticos intercontinentales.
Mientras el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, –cuya administración insinuó la posibilidad de atacar de manera preventiva a Corea del Norte- endureció su dialéctica; Pyongyang no se ha quedado atrás y amenazó con responder a cualquier ataque con su arsenal atómico.
La tensión en la región se ha incrementado, luego de que Corea del Norte llevara a cabo en los últimos meses más de 20 pruebas de misiles balísticos y dos de armas atómicas (Con información de agencias). MR