El 17 de septiembre la enfermera Nancy Hernández viajaría de la terminal de autobuses de Taxqueña, en la Ciudad de México, al estado de Guerrero, pero nunca llegó a su destino; su cuerpo fue localizado en Oaxaca.
Dos días después pobladores de San Miguel Tequixtepec, en la Mixteca oaxaqueña, dieron aviso a las autoridades por la presencia de un cuerpo en un camino de terracería; se trataba de Nancy, enfermera de 35 años y con 30 semanas de embarazo.
Desde el día de su desaparición, familiares y compañeros de trabajo de Nancy emprendieron una campaña de búsqueda a través de redes sociales, sin embargo, fueron contactados por la Fiscalía General del Estado (FGE) de Oaxaca, para el reconocimiento de un cuerpo.
Desde ese momento la FGE les envió fotografías del cuerpo pues coincidía con las características de Nancy, la joven que días atrás había desaparecido en la capital del país.
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Así, el 22 de septiembre los familiares de Nancy viajaron a Oaxaca para reconocer y recoger el cuerpo de la enfermera que trabajaba en el servicio de urgencias del Hospital Regional “Lic. Adolfo López Mateos” de la Ciudad de México.
La FGE abrió una carpeta de investigación por el delito de feminicidio, sin que hasta el momento se tenga algún indicio de los posibles responsables del crimen, tampoco de la forma en la que el cuerpo llegó a Oaxaca.
De enero de 2022 a la fecha, de las 109 muertes violentas de mujeres en Oaxaca, la FGE solo ha tipificado 28 casos como feminicidios, según información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
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