La 4T legisla sobre las rodillas y lo demostró con el decretazo que interpreta el concepto de propaganda gubernamental. Sí, ese que Morena, PVEM y PT aprobaron en fast track dizque para que los funcionarios puedan promover la revocación de mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y digo “dizque” porque en el Tribunal Electoral ya dijeron que el decretazo no aplica para esta consulta. ¡Quihúboles!
A la 4T no le cayó nada bien que el consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), Ciro Murayama, fuera quien evidenciara sus errores.
“El decreto de interpretación legislativa está tan mal hecho que modificó una versión previa de la ley electoral (2014), no la vigente. En vez de reformar lo referido a propaganda (art. 449, numeral 1, inciso b) afectaron una disposición para evitar violencia política de género”, escribió Murayama en su cuenta de Twitter.
Resulta que, entre otros artículos, el decretazo interpreta el concepto de propaganda gubernamental del artículo 449 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, numeral 1, inciso b, que se refiere a la infracción que se comete al menoscabar, limitar o impedir los derechos político-electorales de las mujeres. Lo de propaganda está en otros incisos.
Diría don Porfirio Muñoz Ledo: “Chi… a su madre ¡qué manera de legislar!”.
Y no es que le eche limón a la herida, pero esa iniciativa la presentó ni más ni menos que el presidente de la Cámara de Diputados, el morenista Sergio Gutiérrez Luna; su coordinador, Ignacio Mier, y el representante de ese partido ante el INE, Rafael Llergo. Y se aprobó así, sin moverle ni una coma.
Con esto se pone en evidencia, una vez más, que la 4T legisla al vapor. Y ojo porque están tan enojados con Ciro Murayama que ya están viendo la estrategia para acelerar los trámites que lo lleven a juicio político, junto con el presidente del INE, Lorenzo Córdova.
El decretazo dice que se debe considerar propaganda gubernamental en veda electoral únicamente aquel hecho que implique recursos públicos. A todo esto, ¿quién paga y de dónde salen los carteles de apoyo a AMLO?
La regenta Claudia Sheinbaum debería explicar quién puso los anuncios en el Metro para la “ratificación” de AMLO. ¿Cómo pudieron hacerlo?, ¿cuántos hay?, ¿ya instruyó que se quiten?…
Ah y de nueva cuenta, el INE le dio un revés a Sheinbaum. La obligaron a quitar algunas de sus publicaciones de redes sociales por considerarlas propaganda. Aunque ella asegure que es una medida excesiva y parcial que impugnará, como diría la diputada Mariana Gómez del Campo: “Cumpla con la ley y ya basta de violar la Constitución”.
El INE está obligado a investigar y decirnos quiénes violaron la ley con espectaculares, anuncios, carteles, llamadas telefónicas, encuestas y todo tipo de propaganda que vemos en vía pública para apoyar al presidente en la consulta del 10 de abril.
Y qué me dicen de la carta firmada por el dirigente de Morena, Mario Delgado, que cientos de personas han recibido en sus buzones sin ser militantes de ese partido. Pide “ratificar” a López Obrador para dejar el precedente de que “el pueblo pone y el pueblo quita”.
En las benditas redes sociales, los ciudadanos han delatado toda clase de irregularidades, pues, casualmente, al mismo tiempo que se impulsa la revocación, se promueven los programas sociales que pagamos todos, pero que solo benefician a AMLO y Sheinbaum.
¡El uso indebido de los programas sociales es un delito! Y no veo que el gobierno investigue.
¿Quién más que el gobierno tiene los datos de los beneficiarios de los programas? Ojo porque los adultos mayores han recibido llamadas para que apoyen a AMLO en la consulta, de lo contrario, está en peligro su apoyo social.
La gente está cansada de trampas. No nos quieran ver la cara.