En Davos, papa Francisco cuestiona a líderes mundiales
Pope Francis (R) delivers a speech next to Prefect of the Pontifical House, Monsignor Leonardo Sapienza (L) during the weekly general audience at Paul-VI hall in the Vatican on January 17, 2024. (Photo by Andreas SOLARO / AFP)
/ANDREAS SOLARO/AFP
El hambre, la guerra y la desigualdad fueron algunos se los señalamientos del pontífice, dirigidas tanto a los gobernantes como a los empresarios
En un mundo con guerras, desigualdad y crisis climática, el papa Francisco aprovechó el Foro Mundial de Davos, que reúne a líderes mundiales y empresarios para discutir las soluciones a los problemas globales, para hacer un llamado a los participantes a priorizar el bienestar general antes que las ganancias individuales.
El evento comenzó el 15 de enero con la lectura de una misiva del Papa a cargo del cardenal ghanés Peter Appiah Turkson, presidente de las Pontificias Academias de las Ciencias y de las Ciencias Sociales.
¿Cómo es posible que en el mundo de hoy la gente siga muriendo de hambre, sea explotada, condenada al analfabetismo, carezca de atención médica básica y se quede sin techo?”, cuestionó ante cerca de tres mil representantes del mundo de la política y la economía.
En lo que es ya la 54a reunión de este foro, el pontífice puso como primera prioridad, lograr la paz, sin mencionar especificamente conflictos como el genocidio en Gaza o la guerra en Ucrania. A través de una carta, señaló que “Este año, el Foro Económico Mundial transcurre en un preocupante clima de inestabilidad. Espero que sus debates tengan en cuenta la urgente necesidad de avanzar en la cohesión social, la fraternidad y la reconciliación entre grupos, comunidades y estados”.
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Pero su petición no señaló únicamente la necesidad de abandonar los instrumentos de guerra, sino afrontar la misma raíz de los conflictos.
En este sentido, el hambre también ocupó un lugar predominante en las preocupaciones del papa Francisco, así como la explotación y acaparamiento de los recursos.
De manera indirecta, el Papa también hizo alusión al poder que ostentan las empresas actualmente: “los Estados nacionales tienen una capacidad limitada para gobernar los rápidos cambios de las relaciones económicas y financieras internacionales”, dijo, antes de detallar que el camino empresarial debe estar regido por la moral y la ética.
La misiva de Jorge Mario Bergoglio finalizó con un llamado a las nuevas generaciones a “retomar las luchas y las conquistas de las generaciones pasadas, apuntando cada vez más alto”.
El Foro de Davos continuará hasta este viernes, y se prevé la asistencia de cerca de dos mil 800 invitados, entre los que se incluyen jefes de Estado, millonarios y CEOs, entre otros.
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