“El transporte público concesionado en la CDMX está en quiebra debido a que los gobiernos de izquierda del PRD y ahora Morena los han convertido en rehenes político electorales”, aseguró la Fuerza Amplia de Transportistas (FAT).
En un comunicado, Nicolás Vázquez Figueroa, vocero de la organización, informó que están en bancarrota porque están subsidiando con casi 8.50 pesos cada viaje persona en microbuses y vagonetas y 12.61 pesos los de autobús y Metrobús.
La FAT llamó a subir el precio del pasaje o bien a que el gobierno otorgue un subsidio generalizado.
Vázquez Figueroa agregó que el costo del pasaje en microbuses y vagonetas se ha incrementado sólo 4 pesos en estos 24 años, mientras el de la gasolina subió 16.05 pesos.
La tarifa, ajustada a la inflación, entre 1997 y 2019, debería ser de al menos 13.15 pesos, agregó Vázquez Figueroa, “lo que nos indica que el año pasado los prestadores del servicio público de pasajeros concesionados subsidiamos cada viaje en la ciudad de México con 7.65 pesos y hoy esa cifra alcanza prácticamente los 8.50”.
“Les avisamos que sólo hay dos salidas a esta crisis: Una es el incremento de la tarifa al menos de dos pesos y la recuperación anual del rezago y la otra forma es que exista un subsidio generalizado para todos los concesionarios del transporte público de pasajeros, como ya lo hace el gobierno con las empresas concesionarias del Metrobús”, señaló la FAT. NR