Redacción ejecentral
La indignación se desató en la sociedad brasileña luego de que este lunes un club de segunda división firmó a Bruno Fernandes de Souza, un portero que fue condenado por ordenar el secuestro y asesinato de su novia y alimentar con su cuerpo a sus perros.
El club Boa Esporte dio a conocer un contrato de dos años para Fernandes de Souza, de 28 años, quien fue liberado de la cárcel el mes pasado en espera de una apelación, reportó el diario británico The Gaurdian.
El guardameta había sido encarcelado por 22 años tras confesar los horrendos crímenes en marzo pasado, cuando su exnovia Eliza Samudio fue asesinada.
El anuncio provocó el enojo de la familia de la víctima así como de grupos contra la violencia de género en Brasil.
“Las mujeres están indignadas y también el público en general. Es como si hubiera quedado impune”, escribió Djamila Ribeiro, filósofa política y activista feminista, en la web UOL.
A ello se sumó que tres patrocinadores retiraron su apoyo al equipo en protesta contra la contratación y hackers publicaron denuncias en la página principal del equipo.
En tanto, aficionados aplaudieron el regreso de uno de los jugadores más populares en Brasil, pese a los crímenes que cometió.
La firma de Bruno se da en el marco de un clima de creciente preocupación por los feminicidios y violaciones en el país
Para conmemorar el Día Internacional de la Mujer la semana pasada, el equipo de fútbol Cruzeiro, conocido por sus posturas progresistas, portó camisas que destacaban los problemas con datos relevantes para cada número de los jugadores, por ejemplo: “Una violación cada 11 minutos”. EC