El Tri y la generación imaginaria

La Copa del Mundo de Rusia 2018 será recordada por la generación imaginada. La del “techo psicológico”, dicho por Decio de María, ex presidente de la Federación Mexicana de Futbol, en una última cargada – reproche dirigida a la llamada “generación más talentosa del futbol mexicano”.

Cierto que en el balance final, el Tri no hizo menos, ni más que en las anteriores seis ediciones mundialistas. Al menos en apariencia. Porque en la realidad, el Tri de Osorio, el que prometía jugar el quinto partido, el que exigía desde la voz oficial de sus líderes (Javier “Chicharito” Hernández) que de una vez por todas se expulsara el pesimismo generalizado y se imaginaran “cosas chingonas”, en la realidad ese Tri arrojó el resultado más funesto desde 1994. 12 fue el lugar que ocupó la Selección Mexicana de Futbol al final de la Copa del Mundo de Rusia 2018 Porque desde el ridículo de Argentina 1978, una Selección Mexicana no se comía seis tantos, y no tenía una producción tan pobre de apenas tres goles. Porque de todas las series de octavos de final, la de México ante Brasil fue la que se resolvió de manera más clara.

Porque, sí, se le ganó al campeón el mundo en el debut, con la aclaración que ese triunfo fue ante la peor Alemania de la historia; porque nunca antes la Germania había sido eliminada en una primera ronda de una Copa del Mundo. 7 ocasiones de manera consecutiva son las eliminaciones que tiene el Tri en octavos de final de un Mundial, un récord en la FIFA Porque para medir la realidad del fracaso habría que medir al Tri con una selección más o menos de la misma “estatura”; digamos Croacia, que si bien había sorprendido en 1998 con un tercer puesto; había sido vencida y marginada en la primera ronda de un Mundial por el Tri en 2002 y 2014. La ecuación es simple; Croacia, la misma que el Tri goleó 3-1 en Brasil, hoy, es subcampeona del mundo, ¿y el Tri?, pues según los números y datos, sólo le alcanzó para imaginar cosas chin…