En una reciente mesa de análisis organizada por el New York Times, un grupo de doctores y científicos afirmó que una de las actividades culturales que no regresará pronto, luego de la pandemia del Covid-19 son los eventos masivos, concretamente los conciertos y festivales de música.
Uno de los más importantes, el Festival de Música y Artes de Coachella Valley, y el que planea regresar para octubre próximo, una proyección que, frente a la realidad que nos abruma no deja de ser en extremo optimista.
No sería la primera vez que Coachella confía en su buena estrella: las primeras ediciones fueron un desastre financiero y de logística, pero la fortuna estuvo de su lado hasta convertirse en el referente cultural y de poderío mercadotécnico que es hoy en día.
De ello va Coachella: 20 Years in the Desert, documental escrito y dirigido por el estadounidense Chris Perkel (Foreman, 2017) quien, gracias al acceso que tuvo a
valioso material de stock, nos lleva por la historia musical de Coachella.
Todo inició con Gary Tovar, promotor de la escena punk de Los Ángeles que soñaba con hacer un festival a la vieja usanza de Woodstock. El proyecto se complicó cuando fue encarcelado por vender marihuana en los conciertos que él mismo organizaba, pero uno de sus socios, Paul Tollet, continuó con el proyecto para en 1999 llevar a cabo la primera edición, en el Empire Polo Club de Indio California.
Con una mezcla de géneros que iban desde el rock hasta el alternativo, el hip-hop y el electrónico, la primera edición tuvo éxito con el público operó con pérdidas. Mientras llegaban las ganancias (no fue sino hasta la cuarta edición) el cartel se fue poblando de más y mejores bandas.
Perkel hace un interesante recorrido de nostalgia recordando presentaciones de Pixies, Rage Against The Machine, Jane’s Addiction, Bauhaus, Björk, Morrissey, hasta los inolvidables conciertos de Madonna, Daft Punk y la más reciente presentación de Beyoncé.
Al ser esto un trabajo por encargo, Merkel evita a toda costa cualquier polémica, como la escena elitista en que ha derivado el festival (ricos y famosos son los
únicos con capacidad de comprar los mejores boletos) así como la relación de los organizadores con la campaña de Trump.
A medio camino entre documental de nostalgia y video corporativo, Coachella: 20 Years in the Desert cumple como una revisión sobre el cambio cultural en la música popular: de la ruda estridencia del punk a la ruda cadencia de Beyoncé en un lapso de 20 años. Coachella, ni duda cabe, regresará, aunque tal vez no tan pronto como quisiéramos.
Coachella: 20 Years in the Desert se puede ver en YouTube