Barbarian (EU, 2022) --segundo largometraje (primero en solitario) del cineasta Zach Cregger-- es de esas películas donde inevitablemente uno termina gritándole a la pantalla, advirtiéndole a los personajes que no abran una puerta, que no entren a un lugar, que no confíen en tal persona.
Tan impredecible como divertida, gran parte del éxito de esta cinta radica en el ingenioso (y casi impecable) guion escrito por el mismo Cregger, quien si bien no elude (ni busca eludir) ciertos clichés del género (las puertas que se cierran solas, las habitaciones oscuras) se vuelve notable por cómo hila la historia, haciendo uso de inesperados cambios de tono e inteligentes giros de tuerca que provocan extrañeza, susto y hasta risa.
La estructura de la cinta divide el relato en tres partes. En la primera conocemos a Tess (Georgina Campbell), una mujer que llega a una linda casa (rentada en Airbnb) en medio de un barrio fantasma del viejo Detroit. El escenario no podría ser más turbio: es de noche, cae una tremenda lluvia y las llaves no están en la cajita donde los inquilinos debieron dejarlas. Luego de intentar (sin éxito) quejarse en la app, Tess se da cuenta que hay alguien en la casa.
Se trata de Keith (estupendo Bill Skarsgård) un joven al que por algún error le rentaron la misma casa y para las mismas fechas que a Tess. Amable hasta decir basta, Keith le propone a la mujer que se quede al menos esa noche, le ofrece dormir en el sofá para que ella descanse en la cama (a puerta cerrada), le prepara un té, y ya más en confianza incluso le sirve una copa de vino, abriendo la botella frente a sus ojos para que no tema.
Si no supiéramos que estamos en una película de terror esto bien podría ser una comedia romántica pero, ¿cómo confiar en estos tiempos en un extraño?, ¿cómo saber si todo esto no es un truco?
No revelaré más excepto que algo terrible pasará entre estos dos personajes. Y cuando la cosa se pone peor, un brutal corte de edición (a cargo de Joe Murphy) nos envía a otra historia que no parece tener relación con lo que acabamos de ver. AJ (Justin Long) es un actor a punto de caer en desgracia: es acusado de violar a una actriz, lo cual da por muerta su carrera. ¿Qué tiene que ver esto con Tess y Keith? No se los diré, descubrirlo arruinaría el gozo de esta cinta.
Barbarian toma los horrores cotidianos que sufren las mujeres y los transforma en su materia prima para generar suspenso, tensión y hasta empatía. Con atmósferas inquietantes y un gran manejo de cámara (a cargo de Zach Kuperstein), Barbarian contagia los miedos diarios a los que se enfrentan las mujeres cuando salen a la calle, cuando un extraño les habla o cuando la policía las ignora al pedir ayuda.
Barbarian se puede ver en StarPlus.
