Los números de los ingresos totales de los hogares para 2022 mejoraron con respecto a los registros de 2018 y 2020, pero comparados con los de 2016, el avance fue magro.
Y a pesar de lo que dicen los números, el presidente Andrés Manuel López Obrador festejó los avances que se dieron en su administración, es decir, desde 2018.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) que elaboró el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el ingreso promedio de las familias de 2018 a 2022 aumentó 4.6 %; sin embargo, en seis años sólo creció 0.2 %, es decir, un marginal avance de 130 pesos.
El mandatario presumió que los hogares más pobres aumentaron sus percepciones en 19.9 % en su administración, pero el ingreso de esos hogares apenas es de 13 mil 411 pesos trimestrales, unos dos mil 779 pesos más que en el inicio de su gestión; no obstante, los más ricos, a pesar de haber registrado una caída en sus ingresos de 2.2 % es de 15 veces mayor que lo que recibe una familia en pobreza, una brecha de 187 mil 285 pesos trimestrales.
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“Logramos, por la política de atender primero a los pobres, que, a pesar de la pandemia, en el 22, este decil, sobre todo, porque no pasó con el resto, mantuvo un incremento (…) Todos los deciles se incrementan, todos, incluso el decil de los que tienen más ingresos, aun cuando del 18 al 22, este es el único decil que baja en cuanto a ingresos, pero ya de 22, de 20 a 22, vuelve a tener incremento”, indicó el Ejecutivo.
Aún con el avance en los ingresos de los hogares en pobreza extrema, necesitan que sus ingresos crezcan 3.2 veces para subir a la clase media, o de 2.7 veces para sólo ser pobres, un alto escalón que ascender para salir del sótano en la escala de los deciles por ingreso.
Según los últimos datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en México el 43.9 % de la población se ubicaba en pobreza y el 8.5 % en pobreza extrema.
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