El petróleo dejó de ser “oro negro”
La caída de la economía global de los últimos años y la pandemia, junto con la guerra de precios y la recesión mundial que ha comenzado, plantean un panorama desalentador sobre un largo tiempo de bajos precios del petróleo, tensiones financieras y geopolíticas graves
Hoy es más incierto que nunca el futuro de la energía y sus fuentes generadoras tanto de origen fósil como las conocidas como limpias, en especial, la eléctrica. En los últimos años habíamos advertido el cercano final del petróleo para dar paso a energías limpias, luego de que los grandes productores de hidrocarburos y las grandes potencias de la mano de sus industriales, principalmente automotrices, terminen con la última gota en el mundo.
Es de todos conocido que existen suficientes tecnologías para desplazar a los mil 400 millones de autos en el mundo que se mueven por combustión interna cambiándolos por motores de luz e incluso agua. Los grandes intereses no dejaran que la tierra descanse de la enorme contaminación que el petróleo genera hasta exprimirle el ultimo centavo a esta industria tomando en cuenta que mucha de la estabilidad geopolítica del Medio Oriente depende del petróleo y el manoseo de occidente y Rusia en la región.
En este contexto de salida del petróleo del mundo del siglo XXI comenzó la desaceleración de la economía mundial el año pasado, lo que empezó a afectar a la baja el precio del hidrocarburo como el resto de las materias primas en el mundo. En ello nos encontrábamos cuando los principales productores: Rusia y Arabia Saudita decidieron aprovechar la coyuntura para eliminar el petróleo shale de Canadá y Estados Unidos y, con ello, asegurar una porción más grande del mercado en los próximos 50 años, antes de que este energético desaparezca de la industria.
En efecto, la tecnología del llamado fracking, que a base de agua y exposiciones subterráneas extrae el petróleo de las piedras, había sido una opción para los países de Norteamérica para sacar la última gota de petróleo de la faz de tierra y sacar unos dólares más antes de usar energías más limpias. Sin embargo, el petróleo shale y su extracción es más costoso que el petróleo que sale de los pozos, por lo que Rusia y Arabia Saudita decidieron iniciar una guerra de precios para bajarlos al máximo y sacar de mercado al fracking norteamericano al ser —una vez con precios bajos producto de la guerra—, notoriamente más caro y, por tanto, no rentable y así, los países del otro lado del continente americano asegurarían una mayor cuota de mercado.
Entonces, viene la pandemia nuevamente provocada por China, sus insanas prácticas alimenticias y falta de ética lo que ha generado el paro casi total de la economía global de por sí en desaceleración. Lo anterior, aparejado a la inoportuna guerra de precios del petróleo, ha logrado lo que nunca en la historia del petróleo se había visto; que el otrora oro negro y máximo commodity internacional se desplomara en su precio, al grado esta misma semana la mezcla de Estados Unidos el WTI perdiera todo su valor hasta llegar a -100 dólares por barril, cuando en enero costaba +60.
›El desplome de la demanda de petróleo por parte de todo el mundo y, desde luego, de la gasolina por estar paralizado el planeta, ha hecho que los inventarios, reservas y almacenes de todo el mundo estén completamente llenos, por lo que para este mes el petróleo literalmente no valdrá absolutamente nada, situación que es previsible se mantenga al menos para el siguiente mes.
Lo que estamos presenciando es inédito porque es la primera vez en siglos que el hidrocarburo pierde todo su valor.
La capacidad que todo el mundo de almacenar crudo en contenedores, barcos, tuberías, etcétera, es de 500 millones de barriles, mismos almacenes que están completamente llenos porque simplemente no hay ventas.
Esta situación ha provocado que las empresas petroleras tengan que pagar hasta 100 dólares por cada barril a quien se lo quiera llevar a su casa, lo que es imposible, además de literalmente ridículo. Con una pérdida de 160 dólares por barril de enero a mayo el siguiente paso será el ver cómo se queman e incendian millones de barriles de petróleo en todo el mundo pues no hay manera de cerrar pozos, ni quién lo compre ante la recesión global, por lo que su precio podría seguir incluso bajando.
El daño ecológico será una más de las afectaciones de la pandemia Covid-19. El mundo al revés. Es claro que esta situación no va a durar para siempre y una vez que la pandemia se controle, cuya fecha es incierta, la economía global comenzará a activarse con la consecuente aceleración paulatina del mercado petrolero. No obstante, la recuperación económica global va a ser gradual, por lo que podemos esperar precios del petróleo sustancialmente bajos de alrededor de 15 a 20 dólares por barril para lo que queda de este año, y al menos la mitad del 2021, si no es que todo el año entrante.
Las consecuencias serán importantes, por un lado, la OPEC e invitados estarán orillados a recortar no 10 millones de barriles al día, sino al menos H30; empero, una consecuencia más profunda será que la introducción al mundo económico de energías limpias que son por el momento más caras será retrasada al menos 20 años, lo que es una muy mala noticia para el calentamiento global y la protección al medio ambiente, porque el petróleo será más barato que cualquier otra tecnología alterna.
La caída de la economía global de los últimos dos o tres años más la pandemia del coronavirus, combinada con la guerra de precios y la dura recesión mundial que ha comenzado, nos van a dar como resultado un tiempo largo de bajos precios del petróleo, tensiones financieras y geopolíticas graves y, la natural inconveniencia de seguir con la inversión en la industria petrolera y sus derivados; así como una pésima noticia para las fuentes alternativas de energía que son menos contaminantes.
En el contexto de la salida del petróleo del mundo en el siglo XXI, comenzó la desaceleración de la economía mundial el año pasado, lo que comenzó a afectar a la baja el precio del hidrocarburo como el resto de las materias primas en el mundo.
ES DE INTERÉS: