El sueño de cualquier persona que tiene mascotas y las procura es que vivan por mucho tiempo, y para Leonel Costa ya es una realidad. Bobi, un perrito macho de raza Raferiro do Alentejo, recientemente cumplió 31 años de vida junto a su dueño, convirtiéndose en el perro más longevo del mundo.
La familia de Bobi celebró su cumpleaños número 31 el pasado 11 de mayo con una gran fiesta en su casa, a la que asistieron alrededor de 100 invitados. Costa relató al Guiness World Record (GWR) que el menú consistió en carnes y pescados, y un extra para el cumpleañero que únicamente come comida humana.
La celebración llegó tres meses después de que recibiera el certificado de Record Guiness; un logro inesperado para su familia, pues Bobi casi no sobrevive cuando nació.
La base de datos de animales de compañía de Portugal, autorizada por el gobierno y gestionada por el Sindicato Nacional de Médicos Veterinarios (SNMV), señala que Bobi nació en 1992 en Conqueiros, un pequeño pueblo en el que ha vivido toda su vida.
Costa, de 38 años de edad, relató al GWR que tenía ocho años cuando nació la camada de Bobi, pero su padre no quería quedarse con los cachorros bajo el argumento de que la familia ya contaba con demasiados animales. Con un solo día de nacidos, se llevó a los perritos para deshacerse de ellos.
“Por desgracia, en aquella época se consideraba normal que cuando las personas mayores no podían tener más animales, los enterraban en un agujero”, explicó.
Sin embargo, Bobi demostró ser un luchador. Con el paso de los días, Costa y sus hermanos se percataron que Gira, la madre de Bobi, visitaba el lugar donde tuvo a sus cachorros.
Tras seguirla descubrieron a un pequeño cachorrito que decidieron guardar en secreto hasta que abriera los ojos: Bobi. “Sabíamos que cuando el perro abriera los ojos, mis padres ya no querrían enterrarlo”, comentó.
Bobi goza de buena salud
Costa reveló recientemente que Bobi continúa gozando de buena salud, aunque lo ha llevado a revisiones ante la preocupación del posible estrés al que se ha sometido tras las decenas de visitas que ha recibido desde febrero.
Aunque hay muchos factores que influyen en el tiempo de vida de los perros, Costa está seguro que es el estilo de vida lo que le ha ayudado a Bobi a conservarse tan bien. Gira, su madre, también fue una perrita longeva, pues alcanzó los 18 años.
Costa trata de mantener un entorno tranquilo y pacífico para Bobi, un perrito que ha vivido libremente y que pasea por los bosques. No obstante, los años han cobrado factura y ahora prefiere dormir mucho y quedarse en casa.
“Bobi es especial porque mirarlo es como recordar a las personas que formaban parte de nuestra familia y que desafortunadamente ya no están aquí, como mi padre, mi hermano o mis abuelos, que ya han dejado este mundo”, agregó Costa.
Cabe destacar que el récord anterior lo tuvo Bluey, un perrito australiano que vivió 29 años y cinco meses.
Con información de Guiness World Record.
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