La próxima semana se prevé que la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales emita la resolución que defina si los productores y realizadores de la serie Populismo en América Latina violaron o no las leyes electorales por haberlo realizado con financiamiento de procedencia ilícita. En el centro de la hoguera se encuentran los hermanos Alejandro y Arturo Quintero, junto con sus empresas Grupo TV Promo y TV Promo, quienes trabajaron para la campaña presidencial del candidato priista José Antonio Meade. Muchos nombres más se encuentran en el entramado de la serie que nunca pasó en México, pero que fue considerada como parte de la campaña negra contra Andrés Manuel López Obrador, quien, dicen los que saben, quiere cobrarse aquella afrenta únicamente con los hermanos Quintero.