La alianza Va por México permaneció unida apenas 19 meses; hoy sus propios integrantes se desconocen entre ellos, sus principales logros fueron retener la gubernatura en Durango y en Aguascalientes en las pasadas elecciones, el triunfo de alcaldías de la Ciudad de México y detener la reforma energética en el Congreso de la Unión.
Sin embargo, la división de la alianza se originó, cuando Alejandro Moreno Cárdenas, dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), decidió que la fracción parlamentaria en la Cámara de Diputados aprobara la iniciativa de reforma Constitucional en materia de Guardia Nacional que ha dado la posibilidad que las Fuerzas Armadas colaboren en tareas de seguridad pública hasta 2028, pese a que sus todavía aliados le suplicaron que no la apoyara.
Pero la fractura al interior del propio partido tricolor podría complicar el escenario de la minuta de reforma Constitucional que pasó al Senado de la República, debido a que se requieren al menos 85 votos a favor, con lo que Morena y sus aliados, el Partido del Trabajo (PT), el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Partido Encuentro Social (PES), deberán convencer a la casi totalidad de la bancada priista.
Entre los logros principales de las bancadas de Va por México fue imponer una moratoria Constitucional en el Congreso de la Unión con el objetivo de detener las reformas enviadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador, principalmente la electoral y la de la Guardia Nacional; esta última avanzó a través de iniciativas de reformas a leyes secundarias, y una más enviada por la priista Yolanda de la Torre.
La alianza del PRI, el Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) aumenta su músculo rumbo a las elecciones de 2023, en las que se renovará las gubernaturas de Coahuila y estado de México, los dos bastiones del partido tricolor; sin embargo, esta propuesta de coalición se mantiene por ahora en suspenso.
Tan sólo ayer, el dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, desconoció a Moreno Cárdenas, cuando no quiso saludarlo en el evento de toma de protesta del próximo gobernador de Durango, Esteban Villegas.
Mientras, el presidente nacional del PAN, Marko Cortés, ha declarado que no tiene interés en permanecer en la alianza.
Sin embargo, tras la gran división, el exgobernador de Campeche les ha indicado a sus homólogos que no requiere de ellos para ganar las elecciones.