Mara Fernanda Castilla Miranda, la joven universitaria violada y asesinada presuntamente por el chofer de Cabify que le brindó el servicio que solicitó para regresar a su casa en Puebla, fue sepultada en el panteón Bosques del Recuerdo, de la ciudad de Xalapa, de donde era originaria, tras una calurosa despedida y el clamor de justicia para un feminicidio que conmocionó al país. Familiares y amigos entre llanto y dolor por la pérdida, asistieron primero a una misa de cuerpo presente en la parroquia María Madre, y tras finalizar la ceremonia la acompañaron para su último adiós al lugar que fue el destino final de restos. El cuerpo de Mara Fernanda Castilla Miranda llegó a las 10:55 horas, acompañado de dos camiones cargados de flores, a la parroquia ubicada en la calle Cempoala del fraccionamiento Los Ángeles de la capital veracruzana, donde ya la esperaban. El llanto, el dolor, el coraje y la condena se sentían en el ambiente. Jóvenes estudiantes de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), en donde Mara se preparaba en Ciencias Políticas, acudieron para abrazar a la familia y dar consuelo y fortaleza a su madre Gabriela Miranda, junto con quien ellos realizaron una campaña en redes sociales y en medios de comunicación para dar visibilidad al caso tras la desaparición de su amiga. Sin embargo nada la reconfortó. La señora Gabriela fue quien más lloró y el consuelo que le brindaron todos los presentes no le fue suficiente. El padre Rafael González Hernández, quien ofició la eucaristía, pidió que cese la ola de violencia que aqueja a Veracruz y a todo el país. [gallery size="medium” ids="793058,793060,793061,793059,793105"] El padre Quintín López Cessa brindó algunas palabras de consuelo:
En situaciones difíciles preguntamos dónde está Dios y decimos ‘si hubieras estado aquí mi hermano no hubiera muerto’, así es posible que digan de Mara, pero ojalá que todos los que han querido puedan escuchar esto: Mara resucitará”.
Tras la homilía, se dirigieron de vuelta al panteón Bosques del Recuerdo, en donde había sido velada desde el sábado hasta esta mañana en la Sala 5, y junto al féretro fue colocada una imagen de Mara, en la que se le veía despreocupada.
Una joven feliz, responsable y “con todo un futuro por delante”, a quien le arrebataron la vida, según manifestaron algunos dolientes.
A la 1 de la tarde del domingo Mara Fernanda fue sepultada, ante el acompañamiento de cientos en el camposanto y mientras otras tantas mujeres y hombres se manifestaban en diversas partes del país en condena por este cobarde asesinato y en demanda de justicia a las autoridades federales para esclarece el crimen. Fue desde aproximadamente las 14 horas del sábado 16 de septiembre, que el cuerpo de Mara Fernanda llegó al velatorio en donde muchos la esperaban. Y la honraron con flores blancas, que inundaban el lugar. “Siempre contigo tus amiguis” se leía en alguna corona y otras más daban cuenta de la familia que se unía a la pena de los Castilla Miranda. Los padres de Mara Fernanda recibían la solidaridad y consuelo de los presentes por un caso que ha conmovido a la sociedad mexicana. Mara Fernanda Castilla desapareció la madrugada del 8 de septiembre tras abordar el servicio de taxi privado y sus restos aparecieron en una barranca de la Autopista México-Puebla el pasado viernes 15 de septiembre. La Fiscalía de Puebla confirmó que los periciales revelaron que la causa de muerte fue estrangulamiento y golpes, tras haber sido abusada sexualmente. Esta tarde, a las 16:00 horas, familia y amigos convocaron a una marcha en Xalapa para exigir justicia en el caso de Mara y también pedir seguridad para Veracruz. La cita es en el Teatro del Estado y culminará en la Plaza Lerdo.
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