El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó el atentado contra el Ministerio de Exteriores de Libia en el que murieron al menos tres personas este martes.
Tres “soldados del califato” armados con cinturones de explosivos y armas automáticas fueron capaces de “asaltar la sede del Ministerio de Exteriores del apóstata gobierno libio en el centro de Trípoli”, según anunció el propio EI en un comunicado distribuido por redes sociales.
Tras el ataque, la Fuerza Especial de Disuasión (RADA), bajo el mando del Gobierno de Unidad Nacional, desplegó un intenso dispositivo de seguridad en la capital, especialmente en torno a las carreteras adyacentes a la sede gubernamental. “Tanto el personal del ministerio como la zona comercial fueron evacuados mientras las instituciones gubernamentales permanecen cerradas por el momento”, indicaron otras fuentes. El jefe de la misión de la ONU en Libia (UNSMIL) condenó en una declaración el “cobarde ataque terrorista”. Ghassan Salame también se comprometió a trabajar con el pueblo libio “para evitar que los grupos terroristas conviertan a Libia en un refugio para sus crímenes”.