A pesar de la crisis educativa que dejó la pandemia, la pérdida de aprendizajes y la deserción escolar, México inicia el año 2023 con el presupuesto más bajo para educación básica en los últimos 15 años.
Un pronunciamiento emitido por la organización Mexicanos Primero y la Red Latinoamericana por la Educación (Reduca) señala que mientras en 2007 el gasto en educación básica representaba el 13.5 % del gasto programable, para 2023 es de 9.4 %.
Las organizaciones recordaron que únicamente uno de cada 10 estudiantes de primaria y secundaria es capaz de resolver una operación con fracciones; cerca de la mitad de los estudiantes de ambos segmentos se encuentran en los niveles más bajos de conocimiento en ciencias y lectura; y sólo cuatro de cada 10 alumnos que ingresan a primaria logran llegar al nivel superior.
“De cada 100 niñas y niños que inician la primaria, 40 llegan a la educación superior y los otros 60 quedan fuera del sistema, desperdiciando su potencial y con riesgo de caer en la pobreza, al tener que dedicar su vida a trabajos mal remunerados, incorporarse de manera precaria al sistema laboral, enfrentar embarazos tempranos y, en casos extremos, a caer en las redes del crimen”, denunció Laura Ramírez, directora de Activación de Agentes en Mexicanos Primero.
Para resolver la situación, las organizaciones proponen buscar y reintegrar a los 1.3 millones de niños que desertaron de las aulas, atender la salud socioemocional de los alumnos, aplicar estrategias para la recuperación de aprendizajes, elevar el presupuesto para la formación docente y retomar las evaluaciones para medir los progresos de estudiantes y profesores.