Dos hermanas que se dirigían a un concierto en la alcaldía Iztacalco cayeron en una coladera destapada junto al Metro Velódromo: ambas murieron ante la impotencia de su padre que no pudo rescatarlas.
Las jóvenes caminaban junto a su padre al concierto que Zoé ofrecería en el Palacio de los Deportes, sin embargo, en el paseo peatonal de la avenida Viaducto Río de la Piedad ambas cayeron en la coladera con cerca de cuatro metros de profundidad.
Vanessa y Brenda, de 16 y 23 años respectivamente, cayeron una detrás de la otra frente a su padre, quien hizo todo lo posible por rescatar a sus hijas; pero luego de varios minutos de angustia, ambas murieron ahogadas.
Su padre consiguió una cuerda para intentar rescatar a sus hijas pero le fue imposible hacer que subieran, por lo que se quedó mirando mientras ambas estaban sumergidas entre aguas negras y basura.
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Aunque los servicios de emergencia acudieron en su auxilio, las hermanas ya no presentaban signos vitales, por lo que peritos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México acudieron para realizar las investigaciones correspondientes.
Testigos afirmaron que la falta de alumbrado público provocó que ambas jóvenes no se percataran de la coladera abierta, aunque algunos comerciantes del lugar precisaron que al menos otros tres registros de la zona se encuentran en las mismas condiciones.
Añadieron que en repetidas ocasiones han solicitado a las autoridades de la alcaldía volver a colocar las tapas de las coladeras, pero ha sido en vano, pues a los pocos días se las vuelven a robar, comentaron.
Ya cerca de las 22:00 la madre de las jóvenes llegó al lugar y entre reclamos a las autoridades para que le permitieran ver a sus hijas, lamentó haberles comprado sus boletos para el concierto.
“Venían al puto concierto, de haber sabido no les compro nada”, dijo a los reporteros de La Prensa. EJ
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