En medio del predominio de los partidos Demócrata y Republicano en la escena política estadounidense, el “Partido Socialismo y Liberación” ha emergido como una alternativa desafiante en las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Claudia De la Cruz y Karina García se postularon como candidatas a la presidencia y vicepresidencia, respectivamente, bajo la bandera de este partido, con un mensaje claro: "¡Necesitamos acabar con el capitalismo antes de que acabe con nosotros!”.
Originaria del sur del Bronx y de ascendencia dominicana, Claudia De la Cruz, una educadora popular, madre, organizadora comunitaria y teóloga, lidera esta candidatura. Defiende la liberación de los negros, la liberación de los prisioneros políticos, la independencia de Puerto Rico, la libertad de los palestinos y el fin del bloqueo estadounidense a Cuba.
Acabar con la concentración de la riqueza
Por su parte, Karina García, una organizadora chicana con una larga trayectoria en la lucha por los derechos de los inmigrantes, la justicia salarial y la libertad reproductiva, se postula como vicepresidenta.
La plataforma de esta candidatura socialista busca abordar una serie de problemas que, afirman, los candidatos de la clase dominante no han logrado solucionar. Entre sus prioridades se encuentran:
- Apoderarse de las 100 mayores corporaciones estadounidenses: Buscan transferir el control de estas corporaciones de manos de propietarios multimillonarios a la población trabajadora.
- Recortar el presupuesto militar en un 90%: Abogan por una drástica reducción del gasto militar para destinar recursos a otras necesidades.
- Prohibir el lobby corporativo: Buscan eliminar la influencia de las grandes corporaciones en la política.
- Acciones climáticas agresivas: Comprometidos con abordar el cambio climático de manera significativa.
- Atención médica universal: Luchan por un sistema de salud que brinde cobertura a todos los ciudadanos.
- Reparaciones para los estadounidenses negros: Abogan por medidas que aborden las desigualdades históricas y la discriminación racial.
- Defensa de los derechos de las mujeres y las personas LGBTQ+: Se comprometen a proteger y promover estos derechos.
- Garantizar salarios dignos para todos: Buscan mejorar las condiciones económicas de la clase trabajadora.
En un país donde el bipartidismo ha dominado durante décadas, De la Cruz y García argumentan que es hora de un cambio significativo.
Nos dicen que este país es una democracia, pero cada vez más lo sentimos como un régimen corporativo. No importa qué partido esté en el poder, solo los ricos llegan a la cima”, declara De la Cruz en su anuncio de campaña; García añade: “Sé que este país no duraría ni un día sin la clase trabajadora, así que ¿no es hora de que nos hagamos cargo?”.
Con una visión socialista que promete un cambio radical en la política y la economía estadounidenses, De la Cruz y Karina García buscan atraer a aquellos que buscan una alternativa al sistema actual.
Su candidatura representa una voz desafiante en un escenario político dominado por dos grandes partidos, y el resultado de las elecciones será un indicador de la disposición de los votantes estadounidenses a considerar opciones más allá del bipartidismo tradicional.
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