Por segundo día consecutivo, los normalistas de Ayotzinapa, apoyados por estudiantes de otras regiones del país y activistas, atacaron con petardos y bombas molotov las instalaciones del 27 Batallón de Infantería acantonado en Iguala.
Al filo de este mediodía, los normalistas lanzaron un camión cargado con embutidos contra el portón de acceso del Batallón, al cual prendieron fuego y consiguieron que ardiera durante varios minutos.
El impacto logró que el portón se abriera y permitiera a los estudiantes y a sus acompañantes lanzar al interior algunos proyectiles en llamas. También participaron maestros de la Coordinadora Estatal de la Educación (CETEG).
Al interior, la embestida movilizó a los soldados del Batallón que, cuando se abrió el acceso por el impacto del vehículo, se formaron en un apretado cinturón que tenía el propósito de resistir a los normalistas.
Antes, en una breve ceremonia, los padres de los 43 jóvenes desaparecidos hace ocho años pronunciaron algunos discursos en los que extendieron los reclamos al gobierno de Andrés Manuel López Obrador para que se les dé “una justicia verdadera”, según clamó Joaquina García, madre de Martín Sánchez García, uno de los 43 jóvenes desaparecidos aquella noche del 26 de septiembre de 2014.
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Por su parte, al tomar la palabra el abogado de los familiares, Vidulfo Rosales Sierra, dijo que las investigaciones de la Comisión de la Verdad demostraron que, efectivamente, el Ejército fue cómplice de la desaparición de los estudiantes y que, incluso, un mando del Batallón fue inculpado directamente de haber ordenado la muerte de algunos de los normalistas. Algo que no ha confirmado la FGR.
Los manifestantes exigieron que se amplíen las investigaciones contra el Ejercito para llegar a la verdad absoluta de esta tragedia que enlutó al país.
En tanto, dijeron, nada detendrá la exigencia de aparición con vida de los 43 jóvenes que fueron atacados la noche de Iguala.
El martes de esta semana, los manifestantes agredieron de la misma manera las instalaciones de la 35 Zona Militar con asiento en Chilpancingo, donde un par de horas antes el comandante Enrique Martínez López y la gobernadora Evelyn Salgado habían conmemorado la gesta heroica de los Niños Héroes en la defensa del Castillo de Chapultepec.
Ahí también lanzaron contra el acceso un vehículo de transporte con el ánimo de prenderle fuego, pero no lograron su propósito. Sin embargo, agredieron con piedras y petardos el interior de la 35 Zona militar.
Según ha trascendido, los estudiantes así como los padres de los desaparecidos tienen el propósito de radicalizar sus protestas los próximos días, hasta llegar a la fecha del octavo aniversario, el próximo 26 de septiembre.
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