Francisco Pazos
El presidente Donald Trump no encontrará un camino llano en ninguna de las dos cámaras, el Congreso y el Senado, para concretar las propuestas que difundió durante su campaña.
Aunque en ambas cámaras el Partido Republicano tiene mayoría, la aprobación de proyectos como la construcción del muro en la frontera sur o la imposición de aranceles a productos mexicanos podrían enfrentar oposición entre los legisladores, no sólo del bando demócrata.
Así lo consideró Larry Rubin, representante del Partido Republicano en México, quien explicó que el camino que deberán seguir los planes del presidente que tienen que ver con México tendrán que pasar forzosamente por el escrutinio de los legisladores.
“En Estados Unidos siempre habrá pesos y contrapesos, lo que el poder Ejecutivo diga siempre va a tener un contrapeso en el Legislativo; que seamos todos republicanos no significa que se va a dar un cheque en blanco a alguien para que haga lo que quiera”, aseguró el representante republicano en nuestro país.
“En las audiencias de estos días vimos a republicanos cuestionando seriamente y detalladamente, en audiencias que se dieron de más de nueve horas, a nominados republicanos sobre qué piensan hacer, cómo lo piensan hacer y cómo piensan resolver problemas”, dijo en entrevista con ejecentral.
Rubin consideró que así como el Congreso y el Senado serán actores con un peso específico en las decisiones de la política exterior que tenga que ver con México, de este lado de la frontera, diputados y senadores deben sumar fuerzas para empujar acercamientos y no dejar que el Ejecutivo, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, lleve a cabo todo el acercamiento.
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La agenda primordial, consideró, tendrá que ser la negociación del TLCAN y el problema migratorio, desde el escenario de la política exterior; y también el combate a la corrupción y a la inseguridad para alentar la atracción de inversiones y la confianza en México.
Para el representante republicano, cuyo nombre ha sonado para suceder a Roberta Jacobson como embajador de Estados Unidos en nuestro país, México no tiene tiempo que perder, “se tiene que hacer a toda velocidad, trabajar en una nueva relación y en competencia con todos los países” y aprovechar los vínculos comerciales e histórico que los unen.
Nominación. El nombramiento de Luis Videgaray como canciller abrirá un canal de comunicación, pues el equipo de Trump “lo conoce y respeta”, dijo Rubin.
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