En un inicio de año marcado por las tensiones entre China y Estados Unidos sobre Taiwán y el Indopacífico así como los movimientos militares en Ucrania que han puesto en alerta a Rusia, los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se comprometieron este lunes a “evitar la proliferación” de armas nucleares.
Se trata de una reunión entre representantes de Estados Unidos, China, Rusia, el Reino Unido y Francia que buscan dar a conocer su posición respecto al uso de armas nucleares. “Cada uno de nosotros mantendrá y reforzará aún más sus medidas nacionales para prevenir el uso no autorizado o no intencionado de armas nucleares”, informaron en un comunicado reproducido por AFP. “Afirmamos que no se puede ganar una guerra nuclear y que nunca debe librarse”, firmaron, asegurando que las armas nucleares deben usarse con fines defensivos, de disuasión y de prevención de la guerra.
El pronunciamiento llega poco antes de la 10ª conferencia de examen del Tratado sobre la No Proliferación (TNP), pospuesta debido a la epidemia de Covid, y que tiene como objetivo tranquilizar los temores mundiales de un enfrentamiento catastrófico. De igual forma, transcurre mientras se realizan negociaciones con Irán por su programa nuclear, algo que se ha aprovechado para “establecer un entorno de seguridad que permita conseguir más progresos en materia de desarme, con el objetivo último de un mundo sin armas nucleares”.
Esta no es la primera vez que se acuerda una posición de este organismo respecto a las armas nucleares; ya en diciembre, António Guterres, secretario general de la ONU, alertó de su peligrosidad. “La destrucción nuclear es una espada de Damocles: bastaría un malentendido o un error de apreciación para provocar no sólo el sufrimiento y la muerte a una escala espantosa, sino también el fin de toda vida sobre la Tierra”, fueron sus palabras.
Los encuentros sobre armamento nuclear datan de 1985, en plena Guerra Fría, y fueron los mandatarios Mijaíl Gorbachov, de la Unión Soviética y Ronald Reagan de Estados Unidos, los encargados de las discusiones. Desde entonces, ninguno de los cinco países del Consejo de Seguridad de la ONU había tratado el tema de forma conjunta, detalló la Agencia de Prensa Francesa.