Con una alta tasa de informalidad laboral (56%), un desplome real de 33% en los ingresos de las empresas del Estado (Pemex y CFE) y una baja de 5.8% en los ingresos tributarios, el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió ante los banqueros a que después del mayor proceso electoral en el país, trabajarán sobre una reforma fiscal “profunda”.
“Debemos de facilitar los trámites para la creación de empresas y para el cumplimiento de las obligaciones fiscales de las empresas (...) Por eso, me comprometo a que vamos a llevar a cabo una reforma profunda, radical, de simplificación en beneficio de las empresas, en especial de las pequeñas y medianas empresas”, dijo hoy el presidente desde la Ciudad de México en su participación de la 84 Convención Bancaria.
“Pronto, muy pronto, una vez que terminemos por completo con las malas prácticas, como las facturas falsas y los fraudes fiscales (...), es probable que este mismo año presentemos conjuntamente una propuesta de simplificación a fondo para pequeñas y medianas empresas”, agregó el mandatario.