El gobierno federal pretende cambiar el destino del dinero que recaudan del turismo internacional que entra al país por la vía aérea y con ello eliminar la promoción nacional e internacional de México. A cambio impulsará “estudios, proyectos e inversión en infraestructura”, entre ellos el Tren Maya que requiere una inversión de seis mil millones de pesos. La Iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal de 2019 plantea modificar la Ley Federal de Derechos, y de los 533.15 pesos que paga el turista (visitantes sin permiso para realizar actividades remuneradas) internacional que llega a México se destine a “estudios, proyectos e inversión en infraestructura”. Se busca que “permanezca el porcentaje de participación a que tiene derecho el Instituto Nacional de Migración de 20% y, a su vez, destinar el 80% para estudios, proyectos e inversión en infraestructura que el gobierno federal determine con el objeto de iniciar o mejorar los destinos turísticos del país, generando una mayor derrama económica y una mejor calidad en los servicios que se ofrecen al turismo”, señala la iniciativa. Hasta este año, ese 80% era canalizado al Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), organismo gubernamental encargado de la promoción nacional e internacional de los destinos turísticos del país. Además, el CPTM destina el 10% de esos recursos al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), para estudios, proyectos y la inversión en infraestructura. Miguel Torruco, titular de la Secretaría de Turismo, dijo que serán los consulados los que se encarguen de hacer las labores de difusión de los atractivos del país, ante la desaparición del Consejo. El mes pasado, el presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados, Luis Alegre Salazar (de Morena) señaló que los fondos del CPTM se canalizarán para financiar el Tren Maya, lo mismo que el “Derecho de No Residente”, pagado por el turista extranjero, que suma alrededor de ocho mil millones de pesos anuales.