Apenas siete meses transcurrieron de su llegada a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), y en su segunda aparición en el Salón Tesorería, Pablo Gómez se apoderó de la mañanera. El tema que trató lo valía.
En su primera aparición, el funcionario describió el contenido que tendría la reforma electoral. Ahora, destapó el hallazgo de depósitos millonarios al expresidente Enrique Peña Nieto.
Por segunda ocasión consecutiva, el diálogo circular, como lo llama el presidente Andrés Manuel López Obrador, inició con más de 30 minutos de retraso y tras un breve saludo, dio paso a la sección de “Cero Impunidad”.
Un mega decomiso de fentanilo, la exhumación en el caso Debanhi y la detención de otro implicado en el asesinato de dos sacerdotes jesuitas en Chihuahua, parecieron ser relevantes, pero se apagaron apenas comenzó Ricardo Mejía a repetir la información de cada jueves.
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Acomodándose el saco negro y sus hojas en el atril, Pablo Gómez inició lo que se convertiría en su mañanera.
“Con la venia del Presidente voy a dar lectura de una nota informativa”, el titular de la UIF comenzó, firme y claro, la lectura de los hallazgos en torno a depósitos irregulares al exmandatario priista.
“Se detectó un esquema donde un expresidente de la República obtuvo beneficios económicos. En este esquema se observó que el exmandatario, por medio de transferencias internacionales recibió 26 millones un mil 429 pesos 74 centavos en moneda nacional”, explicó.
Como ningún otro funcionario antes, por más de 36 minutos, y haciendo gala de su cultura y conocimiento, Gómez Álvarez tomó el atril y explicó, a fondo, el trabajo que realiza la Unidad que encabeza este y otros casos.
Los medios no desaprovecharon la ocasión. Ya de paso, preguntaron por el caso de ‘Alito’ Moreno, de cuentas bloqueadas, de investigaciones, de Genaro García Luna, pero a todos les aclaró su punto, sin revelar indagatorias; del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, de él sí respondió: “Cabeza de Vaca es un escándalo, jóvenes”, afirmó entre risas.
López Obrador volvió a tomar la palabra, pero olvidó tratar la violencia imparable que se vive en Tamaulipas o Guanajuato, los feminicidios imparables en la Ciudad de México.
Olvidó mencionar que la los precios siguen aumentando y que la inflación llegó a su máximo en 21 años, la crisis migratoria que sigue creciendo, la falta de agua y hasta el caos en el AICM.
Volvió a tomar el micrófono para lavarse las manos, asegurar que la denuncia contra Peña Nieto no era del Ejecutivo, porque él se comprometió a no enjuiciar expresidentes a menos que el pueblo lo pidiera, pero suavizó, diciendo que tampoco detendría la labor de la UIF y de la FGR.
Pablo Gómez regresó. Por 49 minutos estuvo al frente del micrófono, tiempo en el que hizo suya la mañanera de este jueves.
Este texto forma parte del Diario Nocturno del 7 de julio de 2022
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