La vacunación contra la Covid-19 y la experiencia adquirida con las primeras olas de contagios hizo suponer que la situación estaba bajo control. Sin embargo, el repunte en la propagación del virus SARS-CoV-2 que se ha presentado en las últimas semanas, del cual la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó recientemente, ha generado preocupación en diversas ciudades del mundo.
A más de dos años de que se decretara la pandemia a nivel global, en algunos países como España se vive la séptima ola, mientras que en México y Bolivia la quinta es la que hace estragos. Al margen del número de “recaída” que se enfrente, los gobiernos se han visto orillados a retomar algunas de las medidas sanitarias y restrictivas que se olvidaron ante lo que, se suponía, era una situación controlada.
En Asia, América y Europa hay ejemplos de lo anterior. A continuación, te dejamos algunas situaciones que demuestran que la Covid-19 se mantiene latente, lo cual se ha visto reflejado no solo en los contagios sino también en las muertes causadas por esta enfermedad.
España
En el país ibérico la última oleada ha dejado un exceso de mortalidad de cuatro mil casos entre abril y mayo. Antonio Guirao, investigador de la Universidad de Murcia, atribuye tal impacto a varios factores, uno de ellos a la caída en la inmunidad otorgada por las vacunas. Así como a la relajación de medidas sanitarias, como permitir que no se usen cubrebocas en lugares públicos interiores.
La comunidad autónoma de Islas Canarias ha vivido un incremento reciente tanto de contagios como de decesos, especialmente en personas de la tercera edad. Ante esta situación, Ángel Víctor Torres, presidente de la región, declaró que ante tal panorama se medita la posibilidad de volver a implementar medidas más estrictas en cuanto los expertos lo indiquen.
Por ejemplo, habló sobre reducir la “presión asistencial”, es decir, volver a limitar los aforos de los visitantes en dicho conjunto de islas, ubicado al noroeste de África.
China
Decenas de millones de personas estaban confinadas este día debido a un repunte de contagios de Covid-19, que hace temer en Shanghái el regreso de restricciones draconianas.
La mayor ciudad de China estuvo confinada durante dos meses en la primavera boreal y las estrictas condiciones impuestas exasperaron a parte de sus 25 millones de habitantes.
Desde el 1 de junio, la mayoría de las restricciones fueron suspendidas pero algunos barrios seguían temporalmente cerrados tras la detección de algunos casos.
Pero se ha registrado un aumento de contagios desde el fin de semana y Shanghái contabilizó el miércoles 24 nuevos casos.
Las autoridades lanzaron una nueva ronda de test masivos en la mitad de los distritos de Shanghái y el miércoles cerraron los bares de karaoke luego de detectar algunas infecciones originadas en estos establecimientos.
Cinco semanas después del levantamiento del confinamiento, una parte de los habitantes temen que vuelvan las restricciones.
“No tengo realmente ganas de hacerlo, es inútil”, declaró a la AFP Alice Chan, una habitante, que finalmente se resignó por miedo a perder su certificado sanitario.
“La gente ya no tiene miedo del covid, tiene miedo de quedarse encerrada en su casa”, dijo Yao, vecino de Shanghái que no quiso dar su apellido.
Algunos residentes reportaron el martes en redes sociales que recibieron raciones de alimentos del gobierno, como ocurrió meses atrás.
“Déjeme contarle una historia de miedo: el distrito de Putuo está enviando verduras de nuevo”, publicó un residente en la red WeChat.
Bolivia
La quinta ola en territorio boliviano también ha generado preocupación entre las autoridades. El presidente Luis Arce convocó a finales de junio a una reunión con los 11 ministros del país para abordar la situación. Tras el encuentro, Jeyson Auza, ministro de Salud y Deportes, informó que se acordó establecer 17 artículos donde se incluyen las “nuevas medidas de bioseguridad”.
Tales restricciones entraron en vigor el pasado 1 de julio y se tiene contemplado levantarlas el próximo 31 de agosto. Durante ese tiempo, se prevé que el alza de contagios sea controlada.
Dentro del paquete de medidas se encuentra la obligatoriedad del cubrebocas y la limitación de actividades en espacios cerrados. Además, se dejó en manos de las autoridades municipales y departamentales la reducción de los horarios de atención en centros comerciales y establecimientos.
Francia
La ciudad de Niza, en la turística Costa Azul francesa, reimpondrá el uso de la mascarilla en los transportes públicos, en pleno repunte de contagios por covid-19 en Francia, anunció este miércoles su alcalde, Christian Estrosi.
“Adopté un decreto (...) para que a partir del lunes el uso de mascarilla sea obligatorio” en autobuses y tranvías, declaró el regidor, para quien el gobierno francés acabará imponiéndolo a nivel nacional. Ahora solo lo recomienda.
“Con 200 mil nuevos casos en menos de 24 horas” en Francia, “vemos que estamos en una séptima ola que se dispara y que nos lleva a un inicio de curso [en septiembre] de alto riesgo”, agregó Estrosi en la radio RTL.
Las autoridades sanitarias indicaron el martes que el número de contagios en las últimas 24 horas progresó en más de 206.000, dos días antes del inicio de las vacaciones escolares de verano boreal marcadas por una fuerte movilidad.
El nuevo ministro de Salud, el médico de urgencias François Braun, urgió el martes a las personas de riesgo a inyectarse una segunda dosis de refuerzo y recomendó el uso de la mascarilla “en los lugares abarrotados”.
El gobierno francés presentó el lunes un nuevo proyecto de ley de emergencia sanitaria, que debe ser todavía aprobado por el Parlamento y cuyas medidas son menos restrictivas que las aplicadas en las olas precedentes.
El texto, que abre la posibilidad a imponer un pasaporte sanitario para entrar en Francia, descarta en cambio la reintroducción de un pase vacunal para acceder a bares u otros lugares de ocio a partir del 31 de julio.
A finales de junio, la OMS llamó a los países de Europa a vigilar el virus de cerca tras el importante aumento de los contagios, debido a la subvariante BA.5 de ómicron.
Así, en medio del repunte y con posturas a favor y en contra de la vuelta de las medidas sanitarias y restricciones, el mundo sigue haciendo frente a la Covid-19, una enfermedad que, ya han aseverado los especialistas, llegó para quedarse. GA
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