A tan sólo 33 días de que se venza el plazo, la recolección de firmas sobre la consulta de revocación de mandato reporta un avance de 19.01%, una cifra que según diversos analistas y expertos en temas electorales pone en duda la viabilidad de este proceso insignia del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El último informe preliminar del Instituto Nacional Electoral (INE) detalla que hasta el día de ayer se han recibido 524 mil 510 firmas, mientras que otras 52 mil tenían alguna anomalía, por lo que fueron rechazadas dentro del conteo.
Los lineamientos del INE sobre las consultas populares establecen que se requiere el apoyo del 3% de la lista nominal en al menos 17 estados del país, un objetivo aún lejano si se toma en cuenta el tiempo que ha transcurrido y el ritmo de avance, que ha sido menor a un punto cada 24 horas.
A casi un mes del inicio de la recolección de firmas para promover la consulta sobre revocación de mandato, el objetivo de conseguir poco más de 3 millones de apoyos se diluye entre una baja participación ciudadana que no supera el 20% de avance en todo el país.
Datos del último reporte preliminar del Instituto Nacional Electoral (INE) puntualizan que la mayor cantidad de firmas se han recolectado a través personas que fueron dadas de alta como auxiliares del proceso, quienes han subido un total de 518 mil 293 apoyos a la plataforma habilitada para este fin.
El resto de las firmas han sido recolectadas directamente por la aplicación móvil del INE, mientras que los formatos físicos no han sumado ningún apoyo, pero se espera que esto cambie en las últimos días del proceso, cuando los promotores entreguen estas actas que se han recopilado en las regiones más distantes del país.
Según cifras del INE, en los primeros días de la recolección de firmas para este fin se ha reportado un avance menor al 1%, una cifra que demuestra el ritmo pausado en este proceso, que ya tuvo una extensión de plazo de 10 días al pasar del 15 al 25 de diciembre, lo que podría ayudar especialmente a la recaudación de formatos físicos.
José Roberto Ruiz, consejero electoral, aclaró en una entrevista difundida en las redes sociales del INE que “a este instituto no le corresponde promocionar el registro de firmas para llevar a cabo la consulta, sino que son los mexicanos y mexicanas que, en teoría de forma libre, se han organizado para llevar a cabo esta primera etapa para recolectar los apoyos vía formato físico y mediante una aplicación”.
Además de pedir que el 3% de la lista nominal respalde esta solicitud, los lineamientos del INE también establecen que de realizarse la consulta, es necesario que el 40% de los electores voten para considerarla vinculante; aunque el presidente López Obrador aclaró que respetará la decisión de la mayoría sin importar el porcentaje de participación.
El INE también establece que los partidos políticos y los gobiernos de cualquier nivel no pueden intervenir en la etapa de recolección de firmas para aprobar esta consulta, especialmente porque se trata de un ejercicio ciudadano, algo que diversos especialistas han puesto en duda.
De juntarse las firmas necesarias, la siguiente etapa de este proceso sería hasta el 4 de febrero del siguiente año, cuando el INE emita la convocatoria para esta consulta que se realizaría el domingo 10 de abril en todo el país, lo que determinaría si López Obrador sigue en el cargo.
Dato. La Cámara de Diputados negó al INE el presupuesto para la realización de la consulta.