En respuesta a las sanciones que ha recibido Rusia en los últimos días, su agencia espacial anunció la interrupción de las ventas de motores para cohetes a la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA). “Dejen que vuelen sobre palos de escoba”, fueron las palabras de Dimitry Rogozin, director de la Agencia Espacial Rusa Roscosmos.
Se trata de motores RD-180, de combustión dual. Estos motores han sido utilizados por años por la NASA, y actualmente son una parte esencial del sistema de lanzamiento Atlas V.
Para enfrentar esta carencia, la NASA ha comenzado a trabajar en el desarrollo de sus propios motores, informó el portal Techcrunch. Aunado a eso, la agencia estadounidense aún tiene algunos contratos válidos con Roscosmos, lo que deja un margen de operación sin poner en riesgo sus misiones.
Cabe recordar que durante la anterior invasión a Ucrania, en 2014 se implementó una medida parecida, ya que el entonces viceprimer ministro de Rusia prohibió la venta de cualquier motor espacial de su país a Estados Unidos, lo que comenzó a preparar a la NASA para no depender tanto de su rival en materia espacial. Una de ellas es la empresa Blue Origin, que en los últimos años ha impulsado la investigación y transporte espacial y con la que mantiene diversos tratos.
En el panorama también se encuentra la compañía SpaceX, con la que si bien no mantiene ningún trato por el momento, también se ha mostrado abierta a la cooperación y desarrollo.
