Conflicto con Hamás traería inflación: Fondo Monetario Internacional

23 de Septiembre de 2024

Conflicto con Hamás traería inflación: Fondo Monetario Internacional

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Una ampliación podría costarle 0.15 puntos porcentuales al crecimiento global

De extenderse el conflicto en la región de medio oriente entre Israel y Hamás podría provocar una subida de precios en los energéticos y pondría en riesgo el crecimiento económico, ya que aumentaría las presiones inflacionarias que aún están presentes en un mayor número de países.

La subdirectora Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, dijo que “sí se convierte en un conflicto más amplio haría que los precios del petróleo suban, lo que tendrá un efecto en las economías”.

En el marco de las reuniones anuales de otoño del FMI y del Banco Mundial, la ejecutiva señaló que “realmente esperamos que haya una rápida resolución pacífica para esto en términos de implicaciones económicas”.

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De no llegar un acuerdo de paz pronto podrá complicar la labor de los bancos centrales del mundo en su combate a la inflación a 30 meses de que comenzaron a darse los primeros destellos en los aumentos de precios persistentes y que actualmente están mostrando desinflación. Sin embargo, aún se ubican fuera de los objetivos y las tasas de interés son las más altas en más de 20 años e incluso desde los noventa, como es el caso de Estados Unidos.

Explicó que “cuando nos fijamos en las cifras, supongamos que los precios del petróleo han subido alrededor de un 10% durante los 12 meses posteriores (al inicio del conflicto), se ve que la inflación aumenta alrededor de 0.4 puntos porcentuales. La producción global es menor en aproximadamente 0.15 puntos porcentuales, por lo que puede tener este tipo de efectos”, e indicó que los más afectados serían los países de la región.

En el inicio del bombardeo de Hamás a Israel, los precios del petróleo subieron súbitamente en la apertura del mercado un 4.88%, o 4.12 dólares, pero conforme han pasado los días desde el estallido el pasado 7 de octubre, las cotizaciones han cedido 3.03%, o 3.42%, que en otras palabras el precio subió de 84.45 dólares a 88.57, para luego ir descendiendo a los 85.54 dólares por barril, lo que significa un aumento de 1.29% o 1.09 dólares.

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