Por primera vez en 598 años, la basílica de San Pedro, en el Vaticano, alberga el velorio de un papa emérito: Benedicto XVI. Desde este lunes y hasta el miércoles, la despedida de quien se desempeñó como papa por más de siete años se realiza en la capilla ardiente de este templo católico, a donde han acudido miles de fieles con el objetivo de verlo por última vez; tan solo en el primer día, el Vaticano informó que 65 mil personas tuvieron acceso al lugar del velorio.
A la Basílica acudieron la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el presidente de la República Sergio Mattarella, a presentar sus respetos, poco después de que el arcipreste de la basílica, el cardenal Mauro Gambetti, rociara agua bendita sobre el cuerpo
Como parte del protocolo, Joseph Ratzinger es velado por varios cardenales y miembros de la Curia, mientras que el obispo Georg Gänswein es el encargado de recibir las condolencias.
El martes y el miércoles se podrá acceder desde las 6:00 a las 18:00 horas, de manera que los fieles puedan velar a Joseph Ratzinger, el brillante teólogo y ferviente guardián del dogma, conocido por sus posiciones conservadores, quien renunció a su cargo en 2013, aduciendo el declive de sus fuerzas.
Momentos antes de su sepelio, el actual papa Francisco cerrará los actos fúnebres con un mensaje especial dedicado a su predecesor, en el cual se espera que recuerde su decisión de dejar voluntariamente el cargo.
Cambios en el protocolo
El funeral de un papa emérito —es decir sin funciones—, no cuenta con un protocolo específico, por lo que se espera que se realicen algunos de los pasos para un pontífice en ejercicio, aunque otros actos serán distintos.
Uno de los protocolos que cambiaron fue la ropa y los objetos con los que será enterrado. Benedicto XVI no lleva la “cruz pastoral” —el bastón característico de los papas— ni el palio papal —una cinta circular con cruces que los papas cargan sobre los hombros—. En su lugar, el cuerpo de Joseph Ratzinger luce la sotana blanca que llevaba desde su elección al trono de Pedro el 19 de abril de 2005, hasta su muerte el pasado 31 de diciembre de 2022. También porta una casulla roja y una mitra blanca adornada con un borde dorado, dos emblemas de luto papal.
Entrelazado en las manos se puede ver el rosario, pero lo que más sorprende son los zapatos negros, ya que los zapatos rojos, que usaron Juan Pablo II, Pablo VI y Juan Pablo I, evocan la sangre derramada por los mártires siguiendo los pasos de Cristo.
Otro protocolo que no se realizó fue la destrucción del anillo papal, y las campanas de la Basílica de San Pedro permanecieron en silencio, ya que solo se usan con los papas en funciones.
Según algunos vaticanistas, Ratzinger será sepultado con el anillo episcopal y no con el de pescador, que usó durante sus ocho años de pontificado (2005-2013), ya que fue destruido justo después de su renuncia.
Dato Antecedente. El anterior papa en dimitir fue Gregorio XII, en 1415.