El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, minimizó los riesgos que podría causar la epidemia del virus del Zika en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
De acuerdo al exesgrimista alemán, el organismo mundial hará todo lo posible por garantizar la salud de los atletas “durante el invierno brasileño”, en el cual las condiciones climáticas son diferentes al día de hoy, aseguró.
El COI enviará a los comités olímpicos nacionales guías preventivas acerca del zika mientras que Río de Janeiro se prepara para recibir los juegos, a realizarse del 5 al 21 de agosto.
“Haremos todo para asegurar la salud de los atletas y los visitantes”, señaló Bach en diálogo con periodistas en la capital griega, ciudad que visita para mostrar su solidaridad con los refugiados. “Estamos en contacto con la Organización Mundial de la Salud (OMS), así como con el comité organizador y las autoridades brasileñas”, declaró.
Además, “el gobierno de Brasil, convocó a los países sudamericanos a adoptar una estrategia regional para combatir el virus y anunció una reunión de ministros de salud en Uruguay, el próximo martes”, detalló el dirigente del COI.
El virus es transmitido por mosquitos que proliferan en climas cálidos y lluviosos, además que requieren de agua estancada para criar sus larvas, que también pueden ser portadores de dengue.
Esta tarde, la presidenta Dilma Rousseff dijo que Brasil declarará “la guerra” al mosquito Aedes aegypti por lo que montará una operación contra los centros de reproducción del insecto, hasta que una vacuna sea desarrollada.
Por su parte, la OMS publicó que el virus del zika, relacionado con graves defectos de nacimiento en miles de bebés en Brasil, se está expandiendo de manera “alarmante” y podría afectar hasta a cuatro millones de personas en América.
No existe una vacuna o tratamiento preventivo para este padecimiento, sus síntomas son fiebre, sarpullido y enrojecimiento de los ojos. Un 80 por ciento de las personas infectadas no muestra síntomas, lo que dificulta su diagnóstico.
Agencias