Más de ocho mil elementos de gendarmería blindan la sede de la evaluación docente en el municipio Tlalixtac de Cabrera, a 10 minutos de la ciudad de Oaxaca, en donde se espera a los profesores que este fin de semana concluirán la fase final de la prueba.
En contraparte, Rubén Núñez afirmó que la Sección 22 y Coordinadora Nacional, quienes se han concentrado masivamente en la capital oaxaqueña, accionarán mañana sábado de manera sincronizada en diversos puntos “para impedir que se realice este examen punitivo”. Sin embargo, puntualizó, “evitarán caer en confrontaciones”.
Sin embargo, en entrevista con Raymundo Riva Palacio, el líder del magisterio dijo que la coordinadora está más que lista para acudir a un diálogo o debate. “Estamos mejor preparados que ellos para debatir la evaluación; así que a la hora que el secretario (Nuño Meyer) diga, nos sentamos”
En el mismo espacio, vía telefónica, el Gobernador de Oaxaca, Gabino Cué, aseguró que “siempre ha habido diálogo” con los maestros disidentes salvo que no sea “bajo presión ni a oscuras” porque la única intención es instrumentar la reforma educativa.
Respecto a las críticas de Núñez, dijo que “la reforma no es punitiva, lo que pretende es mejorar la calidad educativa; en el centro están las escuelas y los niños”, respondió el mandatario estatal y afirmó que “el examen no pone en riesgo a los maestros sino que nos permitirá diagnosticar y quienes salgan lo mejor evaluados podrán mejorar su calidad laboral”.
Respecto al fuerte operativo de seguridad, dijo que éste es preventivo, “para dar seguridad y garantizar a quienes ya decidieron evaluarse” y agregó: “Tengo la certeza de que no habrá ningún incidente porque la inmensa mayoría de los maestros se han dado cuenta de que la rectoría la tiene el gobierno y que la mejora vendrá a partir de sus (propios) méritos”.
El Instituto Estatal para la Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) instaló un albergue para mil 500 personas e informó que se han inscrito 1400 maestros para la evaluación.
