La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) urgió a autoridades de los tres niveles de gobierno a esclarecer el homicidio del periodista Salvador Adame Pardo, quien hoy se confirmó que fue ultimado y calcinado en Michoacán, tras haber sido secuestrado desde el 18 mayo en Francisco J. Múgica, Michoacán. Al expresar sus condolencias a familiares, colegas y amigos, el máximo organismo defensor de derechos humanos urgió a intensificar la investigación, la que pidió sea exhaustiva y bien documentada, para que el móvil, cualquiera que sea, se corresponda con las evidencias, a fin de que no haya lugar a dudas sobre el crimen. Asimismo, para evitar caer en precipitaciones que eviten llegar a la verdad, pues el objetivo final es que se finquen las responsabilidades correspondientes. La CNDH precisó que con el homicidio de Adame Pardo se eleva a 128 la cifra de comunicadores asesinados del año 2000 a la fecha, de los cuales ocho han ocurrido en el transcurso del presente año. Este es el octavo homicidio a periodistas ocurrido en el transcurso del año, y el número 42 en los que va de la administración de Enrique Peña Nieto, de acuerdo a lo documentado por ejecentral. Además, se tiene registro de 20 desapariciones de periodistas y 51 atentados a instalaciones de medios de comunicación. Recalcó que cuando se atenta contra un comunicador, tal ataque se extiende hacia la sociedad y contra la democracia, por lo que los periodistas deben contar con todas las garantías que les permitan ejercer su profesión sin amenazas ni agresiones.
Casos como el de Salvador Adame ponen en riesgo la libertad de expresión como bien indispensable de la democracia, por lo cual la sociedad en su conjunto debe rechazar la violencia y exigir que cesen los ataques a comunicadores”, expuso.
