En 2013 un hombre fue golpeado brutalmente presuntamente por 11 elementos militares en el Campo Militar de Apatzingán, caso por el cual la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió la recomendación 53VG/2022, dirigida al titular de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval.
La CNDH reportó que el hombre solicitó ayuda en 2019 y denunció que los elementos militares lo interrogaron por personas que habían sido secuestradas ese año por el crimen organizado. La golpiza provocó que el hombre perdiera el bazo y una de las glándulas suprarrenales.
Sin el debido proceso, el hombre fue trasladado al penal de Matamoros, acusado de ser responsable del delito; estuvo recluido hasta 2019, fecha en que hizo el reporte a la CNDH.
Tras aplicarle el protocolo de Estambul al quejoso, reportó la CNDH, el quejoso puso salir en libertad.
En la recomendación exigen a la Sedena que repare el daño que los presuntos elementos militares le hicieron al hombre, incluyendo una compensación económica justa, inscripción al quejoso en el registro nacional de víctimas para que reciba atención médica adecuada.
Entre las compensaciones que pide la CNDH para asegurarse de que no se vuelva a repetir este hecho está la capacitación a todo el personal en prevención y erradicación de la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes. Así como elaboraciones de certificados de integridad física según los protocolos para la exploración médico legal vigente.
BG
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