La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) nombró a María del Socorro Puga Luévano y a Ernesto Isunza Vera como integrantes del Comité Técnico de Evaluación que será el responsable de calificar la idoneidad de los cuatro nuevos consejeros con los que se renovará el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE), el próximo año.
Sin embargo, los nombramientos fueron duramente criticados por políticos y opinadores. Acusan que no se cumplió con el proceso de designación y de ser personajes cercanos al partido Morena.
Por un lado, la CNDH argumentó su decisión asegurando que “el procedimiento se realizó apegado a las normas internas de esta Comisión Nacional”, pues ambos cumplen con el requisito sentando para esos efectos en el artículo 41.
Además, afirman que no solo cumplieron con los requisitos mínimos de la ley, sino que, , la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, “consideró el cumplimiento de cinco condiciones más”:
Valoró que no hubieran sido postuladas o hubieran ejercido algún cargo de elección popular en los últimos cuatro años previos a la designación; que no hubieran desempeñado cargos de dirección en partidos políticos nacionales o locales en los últimos cuatro años previos a la designación; que no hubieran desempeñado cargos de dirección en agrupaciones políticas nacionales o locales en los últimos cuatro años previos a la designación; también, que acreditaran su participación y compromiso en la defensa del sufragio y la transparencia electoral, y en general en la defensa de los derechos civiles y políticos; y no haberse desempeñado en algún cargo en el Instituto Federal Electoral, ni el Instituto Nacional Electoral, en los últimos 14 años”, indicó la CNDH.
Críticos se lanzan contra designación
Tras conocerse los nombres, no faltó quienes señalaran opacidad e irregularidades en los nombramientos. Por ejemplo, el Ministro en retiro José Ramón Cossío señaló que la advertencia sobre las criticas que hizo la CNDH sobre su designación es una “grave reclamación” por lo que llamó a estar atentos.
La senadora panista Kenia López Rabadán acusó al organismo autónomo de se realizó “en total opacidad y sin enterar a ninguna de las personas integrantes del Consejo Consultivo de la CNDH”.
El experredista Guadalupe Acosta Naranjo señaló que se propuso “a dos personas vinculadas directamente a morena”, y que no se consultó al Consejo Consultivo; incluso declaró que “son aspirantes a dictadores”.
En el mismo sentido, el senador Emilio Álvarez Icaza Longoria acusó a la Comisión de violentar al Consejo Consultivo de la CNDH.
CNDH se defiende
En un comunicado, la Comisión se defendió de las criticas y ataques por sus nombramientos. Señaló que, “ante la nueva andanada de desinformación desatada por los consejeros consultivos y algunos senadores, conviene precisar lo siguiente”:
Argumentó para quienes acusan a Piedra Ibarra de “saltarse” al Consejo Consultivo, que “no existe ninguna prescripción legal que así lo establezca”.
“Es decir, que en el nombramiento de María del Socorro Puga Luévano y de Ernesto Isunza Vera no hay ninguna “opacidad”, y está totalmente apegado a nuestra normatividad interna”, dijo.
Asimismo, precisó que “ambas personas designadas cumplen también con los requisitos de ley, y sobradamente”, pues se incluyeron otras condicionantes que dan mayor certeza de sus aptitudes.
¿Quiénes son los designados?
María del Socorro Puga Luévano es ama de casa, con carrera trunca en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de Nuevo León; ha laborado en el Instituto Mexicano del Seguro Social y está actualmente jubilada.
Mientras que Ernesto Isunza Vera es Licenciado en Sociología por la Universidad Veracruzana, y Doctor en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid (España); se desempeña como Profesor investigador del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), Unidad Golfo (Xalapa), desde 1998 y es Miembro del Sistema Nacional de Investigadores (Conacyt), Nivel 3.
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