En julio de 2016 asesinaron al periodista Pedro Tamayo en Tierra Blanca Veracruz, pero el caso se encuentra infestado de irregularidades, además la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado no brindó protección o auxilio a la víctima ni a sus familiares, aseveró la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). Por el asesinato del periodista, la Comisión emitió recomendación al gobernador Cuitláhuac García Jiménez y al fiscal general Jorge Winckler Ortiz. Pedro Tamayo recibió amenazas antes de ser asesinado, de ello notificó a la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas de Veracruz, quien le brindó medidas de protección a cargo de la SSP local. Posteriormente, cuando Tamayo estaba fuera de su domicilio fue atacado a disparos y trasladado al Centro Médico Regional, donde falleció. La esposa de la víctima acudió a la CNDH para interponer una queja por las fallas en la carpeta de investigación del asesinato y por la omisión de los elementos de seguridad pública para otorgar atención oportuna. Las diligencias de la Comisión concluyeron que el día del homicidio, el equipo de policías responsable de la seguridad de Tamayo no acudió al domicilio refiriendo que habían sido convocados a una reunión. Además, tres elementos que se encontraban en las inmediaciones del lugar el día de los hechos omitieron perseguir a los probables responsables señalados por los testigos. En la carpeta de investigación se integró de forma tardía lo relativo a la presunta participación de un funcionario que desempeñaba un cargo municipal como probable responsable a quien los testigos refirieron como una de las personas que disparó. De 2000 a la fecha, Veracruz es el estado donde más periodistas han sido asesinados, con un total de 22.