Inspirados en artistas provenientes de circos, cabarets y teatros de variedades, Valerio Vázquez y Malcolm Méndez retomaron el estilo y lo adaptaron a la época actual para crear el espectáculo “A capricho”.
“Somos un par de artistas que nos autodenominamos excéntricos porque combinamos el arte del clown con las artes circenses. Aunque el clown o payaso es parte del arte circense, no necesariamente hace actos de mucho virtuosismo escénico, sino más bien cómicos”, dijo Valerio Vázquez, actor y director de la mencionada puesta en escena.
Durante una entrevista con Notimex, Valerio Vázquez señaló que “A capricho” es un espectáculo donde la máxima prioridad es el contacto cercano con el público, quien se siente en una fiesta y más que eso, en una celebración donde la historia depende del público mismo. “Nosotros somos los anfitriones de la fiesta”, añadió.
No se trata, sin embargo, de un espectáculo interactivo, porque el público no participa de manera activa, sino que con sus expresiones corporales, con sus sonrisas, aprobación o desaprobación a cada palabra o movimiento en el escenario, marca la pauta a los artistas para que sigan por el camino o tomen una nueva ruta de actuación.
La obra es un espectáculo de la compañía La Gran Pompa en la que Valerio Vázquez y Malcolm Méndez ofrecen un repertorio de actos circenses, acompañados por el músico en escena Gregorio Villegas. “Tendremos cuatro únicas funciones, los días 12, 13, 19 y 20 de marzo a las 18:00 horas, en el Teatro Raúl Flores”, dijo.
Explicó que se trata del primer espectáculo creado por la mencionada compañía, que se inspira en los varietés de principios del siglo XX y en homenaje a los peculiares artistas circenses llamados “excéntricos”, los cuales actuaban también en cabarets y music-hall, principalmente en Europa y que poco llegaron a este país.
Con repertorio de actos de acrobacia, trapecio, malabarismo, magia y danza excéntrica, todos los números son realizados por el dúo de clowns irrumpiendo en la escena por el mero capricho de conquistar al público con sus artimañas. “A medida que el espectáculo avanza, el público se convierte en cómplice y testigo”, indicó.
Definido por la propia compañía como un espectáculo de comedia visual compuesto de escenas breves de distintos géneros abordados desde un tono de “elegancia ridícula”,
“A capricho” se ha presentado desde hace 10 años en espacios escénicos como el Auditorio Nacional, el Zócalo y el Jardín Hidalgo de Coyoacán.
También, destacó el entrevistado, ha participado en festivales representativos de clown en México, como el Festival de Pantomima Circo y Clown en Milpa Alta, el Encuentro Internacional de Clown de la Ciudad de México organizado por el Centro Cultural Helénico y el Ciclo de Clown del INBA.
