Ante la falta de pruebas sólidas, el fiscal alemán Harald Range, anunció hoy su decisión de suspender las investigaciones abiertas por la sospecha de que Estados Unidos había espiado el teléfono celular de la canciller alemana Angela Merkel.
La acusación de que los servicios secretos estadounidenses intervinieron el móvil (de la canciller) no se ha podido probar con los medios del derecho de procedimiento penal que posibilitan la apertura de un juicio
LOS PROBLEMAS DE LA FISCALÍA
Range emprendió las pesquisas en junio del pasado año por la sospecha de que el celular de Merkel había sido espiado durante años por la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos (NSA).
El detonante fue un documento, publicado en la prensa, que fue interpretado como demostración de que existió esa actividad de vigilancia. La Fiscalía no logró sin embargo conseguir el documento original.
Los documentos presentados por el ex écnico de la NSA, Edward Snowden,no son indicios suficientes para un juicio, informó la Fiscalía.
“No es posible precisar la sospecha y fijar el momento exacto en el que se cometió, el lugar o las circunstancias, así como las personas implicadas”, señala el comunicado.
vía DW