En una emocionante carrera llena de giros y sorpresas, el piloto mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez, del equipo Red Bull, demostró una vez más su impresionante habilidad para remontar lugares al asegurar el tercer puesto en el Gran Premio de Hungría.
El Hungaroring presenció una carrera trepidante, donde Checo Pérez se enfrentó a un desafiante inicio al largar desde el noveno puesto en la parrilla; sin embargo, el oriundo de Guadalajara no se dejó intimidar y comenzó su ascenso imparable hacia el podio desde el inicio mismo de la competencia.
A lo largo de la carrera, Pérez desplegó su destreza al atravesar las defensas de varios pilotos destacados. Entre ellos, se destacan batallas épicas con pilotos de la talla de Carlos Sainz, Lewis Hamilton, Oscar Piastri y Fernando Alonso.
El neerlandés Max Verstappen, sólido líder del Mundial de Fórmula 1, logró el domingo en el Gran Premio de Hungría su séptima victoria consecutiva, la duodécima de Red Bull, que establece así un nuevo récord para una escudería.
El vigente bicampeón del mundo se impuso al británico Lando Norris (McLaren) y a su compañero de equipo, el mexicano Sergio Pérez.
El siete veces campeón del mundo Lewis Hamilton, que arrancaba desde la ‘pole position’, se quedó a las puertas del podio.
Rompen el trofeo a Verstappen
En un hecho surrealista, el piloto Lando Norris protagonizó un momento inesperado en la ceremonia de premiación del Gran Premio de Hungría, luego de que rompiera el trofeo de Verstappen.
Al momento de que el neerlandés recogió su trofeo, Norris lo tiró al suelo sin querer , dejando en tres partes.
Y es que, el piloto británico intentó hacer su famosa celebración al chocar el champaña contra el suelo con el golpe el trofeo de Max ha acabado en el suelo.
Al ser una pieza de porcelana, un material muy delicado, el trofeo terminó hecho pedazos.
Con información de AFP
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